El apetito de los chinos por la carne parece insaciable. Pasada la pandemia siguen comprando carne en abundancia. Este viernes el Departamento de Agricultura de EEUU volvió a corregir hacia arriba sus proyecciones para el país asiático, que en 2021. El consumo de carne vacuna de los chinos llegará por primera vez a 11 millones de toneladas, las importaciones superarán los tres millones de toneladas. Nunca ningún país consumió tanta carne. Para Uruguay, como para Argentina y Brasil es una gran ventaja. Mercados estables en un momento en que todo es incierto. Precios firmes para las materias primas, los lácteos y los granos. Pero en cierta medida con la carne y los lácteos puede pasar como con el petróleo: el alto precio acelera la innovación de los competidores. Y en el caso de la carne y los lácteos, e incluso los huevos, los productos vegetales que compiten avanzan a máxima velocidad.
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