Algunas horas después de que el canciller uruguayo Francisco Bustillo calificara este lunes a Venezuela como una dictadura, el ministro de Relaciones Exteriores de Nicolás Maduro, Jorge Arreaza, salió a contestarle a través de la red social Twitter.
“Bienvenido, Canciller Bustillo. Le sugiero refrescar sus amplios conocimientos sobre los principios del Derecho Internacional, estudiar el Derecho Constitucional de Venezuela y evitar ideologizar la política exterior de su país por afinidades. ¡Que vivan Bolívar y Artigas!”, expresó en un tuit el venezolano.
Este lunes, durante la presentación de las que serán sus líneas de gestión al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores, Bustillo dijo que en Venezuela hay una dictadura y anunció que Uruguay permanecerá en los grupos conformados para buscar una solución pacífica pero no promoverá el diálogo hasta que haya “voluntad” del chavismo.
“Conforme al derecho internacional público, las normas democráticas que nos hemos dado en nuestra América, mi propia convicción, la del presidente de la República, el gobierno todo y no tengo dudas que de cualquier habitante nacido en la tierra de Artigas, con libertad no ofendo ni temo, Venezuela es una dictadura”, dijo Bustillo al ser consultado.
El ministro señaló que Uruguay no tenía “vocación de gendarme internacional” pero advirtió que el posicionamiento será firme. “Vamos a dejar clara la posición de Uruguay en cada foro internacional, entre ellos la Organización de los Estados Americanos (OEA)”, sostuvo.
El nuevo canciller agregó que el país seguirá perteneciendo al Grupo de Contacto Internacional y el Mecanismo de Montevideo pero no promoverá “más acciones en favor de un diálogo en el que sobran conversaciones pero falta la voluntad de una de las partes para avanzar en soluciones que mejoren la situación de Venezuela, y sobre todo de su gente”.
“Cuando veamos realmente que existe voluntad de diálogo, Uruguay va a ser nuevamente uno de los actores principalísimos para encontrar soluciones, pero el diálogo tiene que estar acompañado de acciones y hechos, y de eso se trata”, subrayó.
La posición sobre Venezuela había marcado diferencias entre el presidente Luis Lacalle Pou y el anterior canciller, el colorado Ernesto Talvi. Aunque afirmaba que en Venezuela no hay una democracia y señalaba violaciones a los derechos humanos, mientras permaneció en el rol diplomático el colorado se negó a calificar al régimen como una dictadura, lo que fue rechazado por Lacalle Pou, que si declaró que era una dictadura.
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