El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, rechazó este domingo el gesto racista del canciller de Turquía, Mevlüt Çavuşoğlu, a un grupo de manifestantes de la colectividad armenia luego de la inauguración de su embajada en Montevideo este sábado y señaló que debe ser "fuertemente criticado".
"La comunidad está dolida y con razón", dijo ante la presencia de los periodistas. "Hablamos con el canciller Bustillo y mañana estará convocando al embajador de Turquía en Uruguay. Lamentable situación. Sabe la comunidad armenia-uruguaya que siempre nos han tenido en la causa al Uruguay todo, a la coalición, al Partido Nacional en particular y a quien habla", agregó.
Çavuşoğlu acordó en su visita al país términos de referencia para un TLC y firmó un tratado de protección y promoción de inversiones con el ministro de Relaciones Exteriores, Francisco Bustillo. Tras el encuentro, el diplomático turco se dirigió a la Plaza Matriz para inaugurar la sede de la embajada turca en Montevideo. Allí lo esperaban integrantes de la comunidad armenia quienes estaba manifestando pacíficamente. Sin embargo, el canciller turco hizo un gesto en referencia a la organización terrorista del país Lobos Grises, lo que generó molestia entre quienes estaban expresándose y la reacción inmediata de varios integrantes de la comunidad armenia.
Lacalle Pou afirmó que “avanzar en temas comerciales no quiere decir" que el gobierno comparta "la política interior o externa” de países como Turquía. "Mañana voy a tener una reunión más profunda sobre el tema. Fue un planteo de Turquía hacia Uruguay y nosotros pretendemos abrirnos a todo el mundo", sostuvo, en relación al TLC.
"Con quien podamos avanzar en temas comerciales vamos a avanzar. (Pero) avanzar en temas comerciales con cualquier país del mundo no quiere decir que compartamos la política interior o externa", aclaró.
A modo de ejemplo, el mandatario recordó que durante la pasada campaña electoral insistió en alcanzar un TLC con Cuba, a pesar de las diferencias ideológicas que mantiene con el gobierno de ese país. En ese entonces, su planteo apuntaba a trabajar sobre la "complementación económica" de ambas naciones para fortalecer la inserción internacional de Uruguay, luego de que, a su parecer, la primera administración del Frente Amplio desperdiciara la posibilidad de alcanzar un TLC con Estados Unidos en 2006.
“No me importa si son comunistas, socialistas o capitalistas: si me compran lo que hacen los uruguayos son amigos míos”, dijo en su momento.
En esa línea, este domingo expresó: "Si hay algo que tienen claro es que no estamos de acuerdo con la dictadura cubana. Una cosa es el trabajo de los uruguayos y las relaciones diplomáticas y otra avalar o confirmar algunas practicas políticas en algunos países".
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