De Toledo al mundo: las principales consolas tendrán por primera vez un videojuego uruguayo

Es un videojuego de nicho,  en lo que en España llaman “yo contra el barrio” donde un personaje se enfrenta en riñas con otros. ”Imita a lo que podríamos ver en arcades de los 90; rinde tributo a las mecánicas principales que hicieron de este género uno de los más populares de su época”, dice la descripción en la tienda de Steam, donde se puede descargar para PC.

El nuevo desafío es en el entretenimiento en consolas. Tal vez ser el primer uruguayo que publica en ellas tenga que ver con que el resto de la industria uruguaya está abocada en publicar entretenimientos para dispositivos móviles. Pero es un gol. Y el resto de la comunidad lo festeja como tal.

“¡Un juego hecho por una sola persona en contra de todo el establishment! ¡Hito histórico para Uruguay!”, dijo en Twitter Fernando Sansberro, director de Batovi, un exitoso estudio uruguayo.

Este desarrollo le insumió tres años de trabajo. En general, los estudios tienen responsables de arte, de sonido, de programación y hasta alguien que se ocupa del marketing. Sebastián hizo Fight'N Rage de punta a punta a excepción de la música, que se la pidió a Gonzalo Varela, un amigo suyo.

Varela enfatizó el desembarco de este título en estas tiendas. “Es un hecho extremadamente significativo ya que nunca antes un videojuego uruguayo había llegado a publicarse en las consolas más relevantes del mundo”, comentó.

Hasta ahora, Fight’N Rage no invirtió un centavo en publicidad. Su estrategia fue la herramienta de marketing más antigua del mundo: el boca a boca. Y, así, por lo bueno de su videojuego, empezó a recibir cientos de comentarios positivos. Hasta el momento recibió 863 reviews, de los cuales el 94% son positivos. Además, hubo mucha repercusión en YouTube gracias a que la gente “compartía información sobre el juego sin recibir nada a cambio”, comentó García.

Todos estos comentarios jugaron su partido por sí solo. Sebastián solo comentaba en Twitter las actualizaciones que le hacía a su entretenimiento para que los seguidores se dieran cuenta. También fue un éxito comercial, aseguró y aclaró: “Si este juego lo hubiese hecho un estudio con varias personas, y hubiese vendido lo mismo que vendió, sería todo un fracaso económico, porque no hubiese recuperado el dinero invertido en los sueldos de varios empleados”.