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Las propuestas del partido de ultraderecha que llegó al Parlamento alemán
Desde que terminó la Segunda Guerra Mundial, ningún partido político de ultraderecha había participado en la vida parlamentaria de Alemania. Luego de las elecciones legislativas de este domingo, sin embargo, Alternativa para Alemania logró que más de 90 diputados consigan entrar en el Bundestag, el cuerpo legislativo de ese país.
El partido político se originó el 14 de abril de 2013 en Berlín bajo el liderazgo de dos personas: Alexander Gauland, que solía formar parte del partido de la primera ministra Angela Merkel, y Alice Weidel, una economista del ala liberal conservadora.
Desde que se originó, la coalición concentró su agenda en combatir la inmigración y el islam. Además, es conocida por su rígida posición euroescéptica. Alternativa para Alemania busca disolver el euro al que consideran un "error histórico".
Programa de campaña
El plan político de Alternativa para Alemania tiene como objetivo declarar al islam incompatible con el país e incluye el armado de registros estrictos de organizaciones islamistas. En esta línea, el partido quiere exigir el cierre de las fronteras y acelerar la expulsión de los extranjeros que, según la agrupación, representan una amenaza para la seguridad del país.
La coalición de ultraderecha también quiere alentar financieramente a los inmigrantes para que regresen a sus países y perseguir a los extranjeros que cometan delitos.
Al mismo tiempo, el partido busca incentivar a los ciudadanos para que vuelvan a creer en la familia tradicional y contribuyan al crecimiento poblacional.
Por otro lado, apoya un sistema diferenciado de escolarización en el que se tomen en cuenta las habilidades de los alumnos y aspira a mejorar la medicina en las poblaciones rurales de Alemania.
Dos líderes controversiales
El alemán Alexander Gauland es uno de los integrantes más radicales del partido. Durante la campaña, calificó como "una vergüenza para el país" la existencia del monumento al Holocausto en Berlín. Además, el líder de la ultraderecha dijo que debían estar "orgullosos de los logros" de los soldados nazis.
"Tenemos el derecho de estar orgullosos de los logros de los soldados alemanes en las dos guerras mundiales", explicó Gauland en la campaña política. "No nos tienen por qué seguir reprochando esos 12 años [1933-1945]. No debe seguir afectando a nuestra identidad. Tenemos el derecho no solo a nuestro país, si no también a recuperar nuestro pasado", dijo entonces.
Según El País de Madrid, sin embargo, el líder declaró al ingresar en el Parlamento que la "comunidad judía no tiene motivo para preocuparse".
Por otro lado, Alice Weidel tiene una postura firme pero está en contra de que el partido se convierta en un grupo de neonazis y fanáticos de Hitler.
