Lasso se reúne con Biden para pedirle ayuda financiera en la lucha contra el narcotráfico

Lasso llegó a Washington con una lista de prioridades, entre las que figura buscar ayuda para combatir la criminalidad vinculada a los narcotraficantes que luchan a sangre y fuego por el control del tráfico de droga en las calles y dentro de las cárceles del país, situación que ha dejado ciento de muertos y que obligó al gobierno a declarar el estado de sitio el mes pasado.

"Creo yo que es justo compartir la factura", declaró Lasso a periodistas en el puerto de Guayaquil poco antes de partir a Washington con relación al veloz crecimiento del narcotráfico en el pequeño país, situado entre Colombia y Perú, los mayores productores mundiales de cocaína. "La batalla se realiza aquí, pero los beneficiarios no son solo los jóvenes y niños ecuatorianos sino también jóvenes y niños de Estados Unidos", añadió.

Según el gobierno de Ecuador, el país necesita de al menos unos US$ 5.000 millones para ganar la batalla contra las organizaciones criminales. John Kirby, vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, confirmó que los presidentes, que ya se reunieron con motivo de la Cumbre de las Américas de junio pasado en Los Ángeles, examinarán cómo aumentar la cooperación en seguridad para combatir la violencia de las pandillas.

El comercio será otro de los pilares de la reunión. "Somos el único país de la costa pacífica de América que no tiene un Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos. Esto es importante no solo en materia económica sino para evitar los flujos migratorios creando empleo aquí", afirmó el presidente, que llega dispuesto a abordar el tema "de la manera más frontal y directa".

El viernes el vocero de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, adelantó que se hablará de "iniciativas de integración económica regional, incluida la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas", destinada a movilizar la inversión, fomentar las energías limpias y fortalecer las cadenas de suministro.

Como otros países latinoamericanos, Ecuador intenta esquivar la rivalidad entre las dos grandes potencias manteniéndose en buenos términos con Washington, al tiempo que aprovecha el financiamiento que ofrece Bejing para el desarrollo de obras de infraestructura, en especial en el ámbito de la logística y las apuntadas a conseguir recursos primarios.

Según los analistas estadounidenses, Biden pondrá probablemente el foco en la crisis migratoria en la frontera con México, en donde la policía detuvo durante el año fiscal que va del 1 de octubre hasta el 30 de septiembre pasado a 2.229.718 migrantes, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).

La mayoría de los migrantes son latinoamericanos, pero el número de ecuatorianos es bajo en comparación con el de otras nacionalidades. Incluso así se ha multiplicado en lo que va del año desde unos 600 en enero hasta más de 5.000 en septiembre, según los datos oficiales.

Sobre el tema, Kirby afirmó que Ecuador “dio un ejemplo en la región" regularizando a migrantes y refugiados venezolanos que residían en el país. El funcionario, además, aplaudió las reiteradas condenas de Lasso a Rusia por la guerra en Ucrania y afirmó que explorarán oportunidades de colaboración en el seno del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, ya que Ecuador ocupará una silla durante el bienio 2023-2024.

La partida de Lasso hacia Estados Unidos estuvo precedida por un desembolso de US$ 700 millones por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), luego que el organismo aprobara la sexta y última revisión del programa de facilidades extendidas acordado por Quito. También por la aprobación por parte del Congreso de Estados Unidos de una ley que amplía la cooperación entre ambos países para fortalecer las instituciones democráticas, las iniciativas medioambientales y la lucha contra la corrupción.

Según los analistas ecuatorianos, aunque la visita de Lasso a Estados Unidos pone un broche de oro a su relación con Washington, el presidente ecuatoriano cerrará un año marcado por las protestas antigubernamentales lideraras por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), espacio que participó en las revueltas que provocaron la caída de tres presidentes entre 1997 y 2005.