La fiesta organizada por los futbolistas de Peñarol el 8 de marzo en un club infantil de Malvín y que derivó en el escándalo que atraviesan hoy los futbolistas Walter Gargano y Lucas Viatri, denunciados por delitos sexuales y amenazas de carácter de abuso sexual contra dos mozas del salón, pudo ser reconstruida en base a lo que denunciaron las trabajadoras, lo que salió a informar el abogado de los representantes del salón, Juan Pablo Decia, y las declaraciones de algunos dirigentes del club.
Si bien algunas en estas horas han quedado claros algunos hechos ocurridos en la fiesta, hay otros aspectos que aún se mantienen en la nebulosa. Por ejemplo, ¿dónde y en qué momento tuvo lugar la situación de abuso sexual que denunciaron las trabajadoras? Según el abogado de los propietarios del local, Juan Pablo Decia, el salón tiene cámaras en prácticamente todo el establecimiento; menos en algunos sitios, como los baños. Según dijo el abogado en las imágenes que vieron no se advierte que haya existido en ningún momento violencia sexual hacia las mozas. Decia afirmó que no vieron "ningún tipo de conducta hacia el personal de local que relevara la existencia de una situación vinculada a un acoso sexual o violencia sexual"
Por otro lado, las mujeres denunciaron haber sido amenazadas por los futbolistas, pero no se sabe en qué contexto ocurrió eso.
Tampoco se sabe cuál fue el motivo por el que se organizó la fiesta y el tenor de la misma.
Una persona ajena al plantel de los futbolistas del Club Atlético Peñarol alquiló un salón de fiestas—que usualmente organiza cumpleaños infantiles— para un asado de 30 personas. Finalmente concurrieron entre 60 y 70 personas; informó Decia en el programa La Pecera de Azul FM.
Trabajaron tres mozas y un organizador, que luego se marchó. Entre los asistentes había hombres y mujeres.
Se rompieron vasos, vajillas, mesas, sillas y una mesada. Los presentes además consumieron por encima de lo que habían abonado. En consecuencia, Decia fue contactado por sus clientes. Habló con Walter Gargano y, tras una colecta que realizaron los presentes, pagaron por los daños y por el consumo no previsto.
El abogado también habló con el personal y se le "transmitió el cariz que había adquirido la fiesta con el avance de la noche". "Pero no tuvimos ninguna denuncia explícita que dé cuenta de los hechos que hoy se están denunciando", aseguró.
Las cámaras registraron la fiesta. Decia dijo que esperan el pedido de Fiscalía para entregarles el material. La abogada de las víctimas, Valentina Díaz detalló que "las cámaras arrancan a las 9 de la noche y terminan a las 4 de la mañana".
Por otro lado, la policía concurrió a las 2:30 de la mañana por denuncias de "ruidos molestos" que realizaron vecinos. En ese momento sucedió "el único episodio anormal" que involucró a las mozas; según Decia.
Como quedó registrado en las cámaras, cuando llegó la policía "se generó una tensión entre algunas de las asistentes y otros asistentes del evento". Dos o tres personas, entre ellas Lucas Viatri y Walter Gargano, estaban teniendo una discusión. Se acercó una moza e intentó grabarla con su celular. "Le dijeron que no filmara y quedó ahí", dijo Decia. La discusión "termina sin ningún tipo de gestualidad o de acción que pueda relevar la existencia de una agresión o una amenaza", sostuvo. Según el abogado, las cámaras muestran una conversación corta con un tono "totalmente apaciguado".
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