Una de las novedades de la Expo Prado este año es la presencia de llamas y alpacas, expuestas por el establecimiento Las Brujas. Estos animales se crían para trabajar con ovinos, explicaron a El Observador integrantes del establecimiento de cría ubicado en Las Brujas, Canelones.
Las llamas y alpacas se utilizan para cuidar las majadas, por el instinto que tienen que les permite controlar a los ovinos cuando se acerca por ejemplo un perro o un zorro, se indicó.
Los productores uruguayos cada vez más están eligiendo a estos animales para que ayuden con el control de los ovinos. Lo más recomendable, se detalló desde el criadero, es tener una llama o alpaca por majada, ya que dos ejemplares juntos tienden a apararse del grupo y no cuidarlo.
Son animales muy dóciles, para demostrar su mansedumbre los encargados del criadero los sacaron a caminar por las calles de la Rural del Prado, donde los visitantes de la muestra pudieron tocarlos y sacarse fotos.
En total son cinco los animales que presentaron este año en la muestra ganadera: dos alpacas y una cría y dos llamas.
Según se informó, estos animales se alimentan igual que un ovino, con pasto o ración para oveja, y son fáciles de criar, porque se han adaptado al clima de Uruguay y duermen sin mayores dificultades al intemperie. Cuando hay varios animales suelen andar juntos y no es necesario contar con grandes extensiones de campo para poder tener una.
La lana de alpaca, una de las más valorizadas del mundo, se comercializa en varios países. En Perú donde abundan las zonas rocosas y no tanto pasto, por ejemplo, estos animales suelen esquilarse cada dos años, indicaron desde el establecimiento Las Brujas, pero en Uruguay la situación es diferente, porque gracias a las grandes extensiones de pasto que tiene el país, los animales pueden ser esquilados todos los años.
El Establecimiento Las Brujas no ha industrializado aún la lana de alpaca, informaron.
Este es el primer año que el Establecimiento Las Brujas se presenta en la muestra ganadera de la Asociación Rural del Uruguay.
El proyecto de cría se viene desarrollando hace cuatro años, cuando Fernando Ospitaleche adquirió sus primeras llamas, dos años después incorporó las alpacas. Actualmente, en el establecimiento, ubicado sobre la ruta 48, hay 60 alpacas y 27 llamas; pero además hay caballos Árabes, burros, pavos, gansos y patos.
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