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"Más que un intercambio, fue una mera propuesta": lo acusaron por dos víctimas en Operación Océano y tribunal confirmó su absolución sobre una de ellas
El Tribunal de Apelaciones en lo Penal de 1o Turno confirmó el sobreseimiento respecto de una víctima de la Operación Océano que había dispuesto la jueza del caso, María Noel Tonarelli, según consta en la sentencia a la que accedió El Observador. Se trata de un imputado que igual irá a juicio por haber sido acusados por la Fiscalía por cometer los mismos delitos sobre otras víctimas.
Los abogados del imputado, Alberto Rojas y Andrés Añasco Viera, habían argumentado que la acusación fiscal sobre su defendido relataba una sucesión de hechos que no implicaban un delito. La demanda acusatoria decía que la víctima y el imputado habían tomado contacto a través de la red social Seeking Arrangement en la que ella se presentó como Mía –no es su nombre real– de 18 años. En realidad tenía otro nombre y un año menos.
Comenzaron a conversar y a enviarse fotos con contenido erótico hasta que en un momento él le dice que quería "lograr un arreglo" con ella para "disfrutarla". Según la fiscalía, a cambio de mantener relaciones sexuales él le ofrecía viajes a Punta del Este. Las abogadas de la víctima, por su parte, resaltaron que para una adolescente de un barrio humilde como su representada, eso significaba una retribución.
Sin embargo, Rojas y Añasco Viera destacaron que su cliente vivía en Punta del Este y por eso le proponía encontrarse ahí. Así lo entendió la jueza y el tribunal.
En el Código Penal no está configurado como delito que una adolescente de 17 años tenga relaciones sexuales con un hombre de 54 años, si no que eso ocurra porque el mayor le ofreció algo a cambio. En este caso, para los jueces no surge de la acusación fiscal que el imputado le haya ofrecido algo a cambio.
"Dicha inferencia opera como un mero punto de encuentro, por lo que no se puede tomar en principio como una retribución", expuso la jueza Tonarelli en audiencia, según recoge la sentencia del tribunal.
A su vez, los ministros –en forma unánime– indicaron que, pese a que entienden que no se puede prescindir de la perspectiva de género en casos como estos, "solo forzando los conceptos hasta un nivel que terminaría por bordear en lo arbitrario, se podría interpretar como lo postula la parte acusadora", dijo refiriéndose a la tesis de la Fiscalía, que indicaba que la retribución estaba dada en los viajes a Punta del Este.
"Más que como ofrecimiento o ventaja del acusado hacia la joven para que ejecute actos sexuales o eróticos, en los hechos operó en realidad como una mera propuesta, que tuvo como norte acordar un lugar de reunión o encuentro entre ambos", concluye la sentencia.
En el mismo fallo confirmaron la decisión que había tomado la jueza Tonarelli respecto de otro imputado, en el cual había surgido una confusión respecto de la cantidad de víctimas por las que había sido acusado. La Fiscalía manifestaba que había sido acusado por delitos contra una sola víctima, la principal, y que las menciones a otra adolescente eran solamente parte del contexto. Sin embargo, la defensa de ese imputado alegaba que había sido formalmente acusado por delitos contra ambas –para fundamentarlo citó pasajes de la acusación– y pidió el sobreseimiento por los delitos contra la segunda adolescente, puesto que de la conducta descripta, a su juicio, no se desprendía una conducta delictiva.
La jueza Tonarelli había entendido que la fiscalía lo había acusado por ambas víctimas y que correspondía el sobreseimiento por la segunda. El tribunal lo entendió de la misma forma.
La Operación Océano todavía se encuentra en etapa de control de acusación –en la que se debate qué prueba ingresará a juicio y cuál no– y luego de eso se fijará fecha para que comience el juicio oral, que estiman será en 2024.
