Foto de archivo

Mundo > FALTA DE TRANSPARENCIA

México suma más de 100 mil desaparecidos desde 1964 y 52 mil cadáveres sin identificar

Los datos surgen de un informe difundido por el Comité Internacional de la Cruz Roja Internacional en el marco de XIII Encuentro Nacional de Servicios Médicos Forenses que se realiza en México DF
Tiempo de lectura: -'
22 de julio de 2022 a las 05:04

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) reveló en el marco del XIII Encuentro Nacional de Servicios Médicos Forenses que se realiza en México que el país tiene 52 mil cuerpos de personas sin identificar en fosas comunes y que el número de personas desaparecidas supera ya las 100 mil desde 1964.

"En el país hay 52 mil cuerpos sin identificar en los servicios médicos forenses y en las fosas comunes, según datos del Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México, que han sido retomados y citados por las autoridades mexicanas", dijo en un comunicado el CICR.

El encuentro convocado por el organismo y el Instituto de Ciencias Forenses de Jalisco, y respaldado por el Instituto de Ciencias Forenses, se extenderá hasta el viernes. “Para hacer frente a este desafío es necesario mejorar las capacidades de búsqueda e identificación, así como los procesos de notificación y entrega digna", advirtió la Cruz Roja, según informó la agencia de noticias Sputnik.

El jefe de operaciones en México del CICR, Miguel Ramírez, instó a recordar, además, que "independientemente de cuál sea la cifra, detrás de cada número hay personas e historias". El estudio de la organización señala que con nuevos actores en la materia, el reto implica reforzar la coordinación de las instituciones en el intercambio y flujo de información.

"Aumentar las identificaciones forenses y garantizar la trazabilidad de los cuerpos de personas fallecidas no identificadas e identificadas pero no reclamadas es un gran reto que, de abordarse de manera coordinada, contribuiría a aliviar el dolor de miles de familias que buscan respuestas sobre la suerte y el paradero de un ser querido desaparecido", planteó Ramírez.

Por su parte, las Naciones Unidas y los familiares de las víctimas urgieron al Estado mexicano a desplegar todos los esfuerzos para frenar la tragedia de los desaparecidos, luego que el país rebasara los 100 mil casos. António Guterres, secretario general de la ONU, expresó su "profunda tristeza" por la problemática y transmitió su "solidaridad a los familiares que anhelan reencontrarse con sus seres queridos".

Stéphane Dujarric, vocero de Guterres, calificó como “positivas” las iniciativas adoptadas por el gobierno del presidente Andrés López Obrador, como la sanción de la Ley General de Desapariciones y la conformación de comisiones nacionales de búsqueda. "Ningún esfuerzo debe escatimarse para poner fin a estas violaciones de los derechos humanos de dimensión extraordinaria", agregó Michelle Bachelet, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Bachelet reconoció que México ha dado pasos para enfrentar la crisis, pero insistió en que el Estado mexicano debe redoblar esfuerzos. El Comité contra la Desaparición Forzada (CED) de la ONU, que visitó el país en noviembre pasado, consideró el problema como una "tragedia humana".

En un comunicado, el CED y el Grupo de Trabajo sobre las Desapariciones Forzadas e Involuntarias de la ONU lamentaron que a pesar del trabajo de las autoridades, las organizaciones y los familiares, estos crímenes siguen "ocurriendo a diario en México reflejando un patrón crónico de impunidad".

Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas, desde 1964 se desconoce el paradero de 100.099 personas, aunque los colectivos de búsqueda y los activistas creen que la cifra es mucho mayor, pues algunas familias no denuncian las desapariciones ante las fiscalías por miedo al crimen organizado, o bien por desconfianza en las autoridades.

Las desapariciones forzadas comenzaron en México con el accionar de los llamados “grupos de tareas” integrados por militares y paramilitares que secuestraban, torturaban y ejecutaban en la clandestinidad a los militantes de los movimientos revolucionarios durante el período 1960-1980.

 Sin embargo, el número de víctimas se disparó a partir de la década de 2000, con el aumento de la actividad de los narcotraficantes y la guerra que el expresidente Felipe Calderón (2006-2012) declaró a los cárteles al inicio de su gobierno. Desde entonces, la espiral de violencia sumó unos 340 mil asesinatos, la mayoría vinculados al crimen organizado.

"Una estadística más" 

Cecilia Flores, líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, quien lucha por encontrar a sus hijos Alejandro y Marco Antonio, declaró a la agencia de noticias AFP que la crisis es alentada por la desidia del Estado. "Si las autoridades hicieran su trabajo, no hubiera tanto desaparecido. Para ellos, un desaparecido es un delincuente menos, una estadística más", sostuvo.

Los colectivos como el que conforma Flores se dedican a buscar a sus seres queridos con pico y pala en las fosas clandestinas. Una búsqueda peligrosa en la que algunas personas también desaparecen. Tras conocerse que las víctimas habían superado las 100 mil, el Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México, que agrupa a unos 60 colectivos de búsqueda, exigió a López Obrador hacer de esta crisis una "prioridad decidida de su gobierno" y no delegarla, según un comunicado.

Por su parte, el CICR pidió fortalecer "los mecanismos de prevención, búsqueda e identificación". En este contexto, el gobierno asegura que son 37 mil los cadáveres sin identificar en las morgues –y no  52 mil como denuncian las organizaciones civiles– y que la creación de una base de datos para cotejar muestras de ADN tomadas a parientes de desaparecidos con las de restos sin identificar constituye un avance.

La lectura de los analistas y las organizaciones civiles señalan al crimen organizado, y en especial a los carteles de narcotraficantes, como la principal razón detrás del fenómeno de las desapariciones, aunque advierten sobre la existencia de otros delitos, como la trata de personas y el tráfico de migrantes, que en ocasiones involucran a las autoridades. De hecho, algunos de los estados con más desaparecidos, como Jalisco y Tamaulipas, son al mismo tiempo duramente golpeados por la violencia ligada al crimen organizado y la corrupción policial, según oenegés.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...