Michelle Suárez y el "triste honor" de ser la primera trans legisladora

Este martes, Michelle Suárez ingresará al Legislativo y jurará su cargo como senadora. Y de esta forma seguirá marcando una particular historia. Quien fuera la primera transexual del Uruguay en lograr un título universitario, en su caso de abogada, se convertirá en la primera senadora trans del país y el Parlamento sumará una integrante de uno de los sectores más excluidos de la sociedad.

Y el sentimiento también se repite: el del "triste honor" que mezcla el logro de ingresar al Parlamento como una pionera pero, al mismo tiempo, dejar en evidencia la "circunstancia de vulnerabilidad" en la que vive esta población.

"Por un lado es esperanzador y por el otro delata todo el trabajo que queda por hacer", dijo a El Observador Suárez, quien ingresará al Parlamento con el objetivo de defender e impulsar el proyecto de ley Integral sobre la población trans, del que es coautora.

Ella es una de las 937 personas trans que viven en Uruguay, según los datos del censo sobre personas trans del Ministerio de Desarrollo Social (Mides).

Además, integra el selecto grupo de cinco personas trans que llegaron a culminar una carrera terciaria.

A su difícil trayectoria de vida por su condición de transexual se le suma que perdió a su madre mientras estudiaba en la Universidad de la República, y a su padre hace poco tiempo.

Luchadora, inteligente y "de decir lo que piensa", como la definen quienes han militado con ella, Suárez aportará un nuevo "punto de vista" en el ámbito legislativo. "Frente a una cantidad de circunstancias de la vida tiene un empuje que es enorme. En su lucha social pero también en su vida privada", destacó Federico Graña, director nacional de Promoción Sociocultural del Mides.

Suárez es de Salinas, tiene 33 años, asumió su nueva identidad a los 15 y asegura que tuvo una infancia feliz pero una adolescencia dura. Comenzó a militar en la sociedad civil en 2009 y a partir de marzo de 2010 participó en la redacción del proyecto de ley sobre matrimonio igualitario.

Su militancia social siempre estuvo relacionada con el colectivo Ovejas Negras, del que hoy es asesora jurídica.

En 2013, un compañero de militancia la invitó a unirse al Partido Comunista (PCU), al que representará desde este martes en el Parlamento. Decidió dejar la "cómoda posición" que le permitía no estar afiliada a ningún partido y decidió cruzar la calle para luchar desde adentro del sistema político por sus convicciones.

Tiene la esperanza de que su trayectoria aliente a otras personas trans y al mismo tiempo sirva para derribar prejuicios y allanar el camino. "Todas las personas que trabajamos en procesos colectivos en la sociedad civil es lo que anhelamos", confesó.

Suárez asumirá su banca en lugar del senador Marcos Carámbula únicamente para impulsar el proyecto de ley Integral sobre personas trans que ya ingresó al Parlamento y comenzará a ser tratado en la comisión de población y desarrollo de la Cámara de Senadores en las próximas semanas.

Se trata de un texto que incluye una batería de medidas para "conseguir herramientas que permitan la igualdad sustantiva en el acceso y goce de derechos para la población trans".