El ministro de Ambiente, Robert Bouvier, señaló que desde la cartera están analizando la rotura del caño de UPM de Pueblo Centenario para saber lo que "realmente pasó" y qué "impacto" puede tener tras el derrame de celulosa.
Bouvier señaló que la celulosa que salió del caño roto "es un producto que está por terminarse". "Esa celulosa es un producto que se comercializa, lo están juntando para comercializarlo en el futuro", señaló en rueda de prensa luego del evento de la Asociación de Dirigentes del Marketing (ADM).
A su vez, señaló que hay técnicos trabajando en el lugar para elaborar un informe sobre la situación. "Estamos evaluando, parecería que el problema simplemente fue un tema operacional", aseguró. "No puedo decir si puede haber sanción o no porque estamos en la etapa del informe final", reiteró.
"Pensamos que en un par de días vamos a tener la evaluación final", concluyó.
La operativa de UPM de Pueblo Centenario, en Durazno, está detenida desde el sábado debido a la rotura en una cañería que generó el derrame de celulosa en el piso.
"La celulosa quedó contenida dentro del área de proceso y los sistemas de recolección diseñados para tal fin", informó la empresa en un comunicado.
Según se aclaró, el evento no tuvo "ningún impacto en el ambiente" y no hubo personas lesionadas.
UPM aclaró que pudo haberse generado mal olor "de forma eventual" en las cercanías de la planta.
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