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Olímpicos de Tokio: Ariarne Titmus, la "Terminator" australiana que se roba el protagonismo de la favorita Katie Ledecky en la natación
Le dicen "Terminator" y en Tokyo 2020 le está haciendo honor a su apodo.
En su primera participación en unos juegos olímpicos, la nadadora australiana Ariarne Titmus se ha convertido en la gran figura en las piscinas de Tokyo 2020.
Titmus, de 20 años, ya acumula dos medallas de oro, pero el mérito se hace aún mayor tras haberlas logrado ante la estadounidense Katie Ledecky, quien con cinco medallas olímpicas llegó como la gran favorita.
El miércoles, Titmus se llevó el oro en los 200 m libre, con un tiempo de 1 minuto 53,50 segundos, lo que le valió un nuevo récord olímpico.
Ledecky, por su parte, solo alcanzó el quinto lugar.
El lunes, la australiana también había logrado el oro en los 400 m libre, mientras la estadounidense tuvo que conformarse con la plata.
"No puedo creerlo, estoy tratando de contener mis emociones", dijo Titmus tras esa victoria.
De esta manera, la australiana ya ganó dos de los tres duelos individuales que podría tener frente a Ledecky.
El sábado, ambas podrían volver a enfrentarse en la final de los 800 m libre, una categoría en la que Ledecky tiene el récord mundial y olímpico.
Este miércoles, Ledecky se llevó el oro en los 1.500 m libre, una categoría que es su especialidad y en la que no compitió Titmus.
Terminator
Ariarne Titmus nació en Tasmania, una pequeña isla-estado de Australia, y comenzó a practicar natación desde los 7 años.
"Soy de un pequeño pueblo de Tasmania. Esto muestra que si lo crees, puedes lograrlo", dijo Titmus en un artículo del portal de los Juegos Olímpicos.
La contundencia de Titmus en el agua le ha valido que algunos en su país la llamen "Terminator".
En 2019 fue campeona mundial de 400 libre, también frente a Ledecky.
En la misma competencia, Titmus estuvo en el equipo que se llevó el oro en los relevos 400x200 libre, con récord mundial.
Rivalidad y admiración
Desde su victoria el lunes Titmus expresó su admiración por Ledecky, reconociendo que tenerla como rival le hacía nadar aún con más fuerza.
"No estaría aquí si no fuera por ella", dijo Titmus refiriéndose a Ledecky.
"Si no tuviera a alguien como ella a quien perseguir, definitivamente no estaría nadando de esta manera".
En Tokyo 2020, sin embargo, ha sido Ledecky quien ha tenido que perseguir a Titmus.
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