Las personas que consumen noticias a menudo reconocen inmediatamente a Omran, el
niño sirio protagonista de una de las imágenes que marcaron el conflicto en
Siria el año pasado. En pleno momento de
bombardeos por parte del régimen de Assad sobre territorio rebelde, la imagen de Omran, aturdido por los atentados, dio la vuelta al mundo
tanto como la de Aylan Kurdi, aquel niño que murió intentando escapar de su país en las costas de una playa turca.
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Pero Omran Daqneesh, que en agosto de 2016 se convirtió en uno de esos símbolos efímeros de la guerra, volvió a aparecer esta semana, casi un año después. En el video que apareció en internet, se lo puede ver sonriendo y en medio de una situación mucho más esperable para un niño de su edad.
Las heridas que sufrió Omran fueron infligidas por el bombardeo de las fuerzas de Assad, pero ahora él y su familia se encuentran del otro lado del asunto. Una periodista
a la que medios como El País de Madrid señalan como cercana al régimen de Assad, Kinana Allouche, entrevistó al padre del niño y al propio Omran. Básicamente, en el video el padre asegura no querer irse de Siria y denuncia a los rebeldes por amenazas. También el padre asegura a la reportera que cambió el nombre de su hijo para protegerlo.