Policías eventuales, la solución de Bonomi para comerciantes

El Ministerio del Interior recomendó a comerciantes contratar el servicio de policías eventuales para la custodia de sus negocios, como alternativa al limitado 222 y el ilegal 223, informó la cartera. Según explicó el ministro Eduardo Bonomi, estos agentes fueron formados para ser policías, tienen estado policial, uniforme y portan arma, pero no están presupuestados y por lo tanto no pueden hacer carrera mientras se mantengan en ese régimen.

Ese servicio, que se creó en 1957, había entrado en desuso a partir de la década del 80 cuando se instauró el servicio 222. Este último fue limitado por la ley de Presupuesto de 2010, por lo que comerciantes que seguían requiriendo este servicio y que no podían pagar por empresas de seguridad siguieron contratando a policías de manera informal, una modalidad conocido popularmente como 223.

Después de que directivos del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu) se reunieran con jerarcas del Ministerio del Interior la pasada semana para plantearles la necesidad de que se habilite el 223, la cartera decidió reflotar a los llamados policías eventuales.

Tras la muerte durante una rapiña del cabo Wilson Coronel, mientras realizaba ese trabajo ilegal en una pizzería de Pocitos, el Ministerio del Interior volvió a mostrarse implacable contra el 223 al denunciar penalmente a los propietarios del comercio en el marco de la ley de responsabilidad penal empresarial, que obliga al empleador a garantizar la seguridad de los trabajadores. "El servicio 223 es ilegal. Cada vez que nos enteremos de que hay un servicio 223 lo vamos a denunciar penalmente" había dicho Jorge Vázquez, subsecretario del Ministerio del Interior.

Según indicó el subdirector general de Secretaría del Ministerio del Interior, José Pedro Sesser, a la Unidad de Comunicación de la cartera, esta alternativa es más barata que el 222 y por lo tanto puede ser una solución para aquellos comercios que no pueden pagar por una empresa de seguridad privada. De esa forma, mientras que por 48 horas semanales el costo mensual de un policía eventual es de $ 51 mil, el de un 222 sería de $ 60 mil.

Sin embargo, el presidente de Cambadu, Mario Menéndez, dijo a El Observador que comunicarán la propuesta de este servicio a sus socios, pero que no será una solución para todos los comercios. Es que, mientras que el servicio de policías eventuales implica la contratación de ocho horas diarias, quienes recurren al 223 cuentan con mayor flexibilidad. De esta forma, un restaurante que solo trabaja al mediodía y a la noche, puede elegir contratar al policía unas pocas horas antes del cierre –cuando el comercio ya tiene dinero en la caja–, y así reducir su costo en seguridad. Por esta razón Menéndez opinó que seguirá habiendo comercios que contraten informalmente a policías bajo la modalidad conocida como 223.

En la reunión que Bonomi mantuvo con dirigentes de Cambadu, el ministro recomendó que los comercios "hagan llegar sus necesidades" de modo que si uno necesita un policía por tres horas y otro que está a un kilómetro de ese lugar lo necesita por cuatro "capaz" que se puede "combinar la disponibilidad". En tal caso será la cartera quien coordine de qué forma se daría esa cobertura, agregó Bonomi.