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¿Por qué a Los Teros se les escapó la chance de hacer historia? Los 20 minutos negros donde no salió nada
Uruguay cayó 38-17 ante Italia su segundo partido en el Mundial de Rugby Francia 2023. La derrota se explica por gran mérito del rival, que vive su mejor momento de la historia, pero también por errores de Los Teros que terminaron condenando al equipo.
El juego con el pie
Uruguay se fue al descanso ganando 17-7. En el entretiempo el plan fue el mismo que en el primero: seguir generándole problemas a Italia en el juego, según dijo el head coach, Esteban Meneses. Pero para eso había que salir de la zona roja. Como se le dice tácticamente: las jugadas en zona defensiva en las que hay presión del rival.
De ahí se sale con el pie. Con kicks arriba, en lo posible a cargar para recuperar. O si no, lo suficientemente atrás para generar presión al rival O si hay más metros, con kicks a las bandas, para ceder la posesión pero con territorio más manejable.
Sin embargo, Uruguay tuvo un muy mal juego con el pie en esos 20 minutos y le regaló la posesión que más quería Italia: pelotas en el pecho de sus backs, con muchos metros que correr.
Un kick tapado a Etcheverry, con el partido 17-14, obligó a retroceder 20 metros y jugar bajo presión.
Una fase después, una patada de Arata se queda corta y no sale del terreno, lo que obliga a seguir bajo presión defendiendo. Encima con uno menos porque Vilaseca acababa de salir con amarilla. Las dos siguientes fases fueron buenas, pero a la tercera los tackles empezaron a ser retrocediendo, un mal augurio que terminó trayendo el try de Ioane a la sexta fase: 21-14 e Itallia que pasaba al frente.
Y en la siguiente salida, otro problema: kick italiano, y una bomba a arriba de Tite que no tuvo presión.
Italia otra vez con el impuso y una jugada de varias fases ganando contactos, hasta generar el espacio por la punta y el try del 28-14, que terminó de quebrar al equipo, y que debió ser anulado por knock on.
Falla en el contacto
Pero Uruguay hubiese podido recuperarse de esos malos kicks. Es cierto, le dieron una plataforma buena a un Italia con el momentum del partido, pero justo ahí se vio lo más flojo del juego ofensivo uruguayo, con contactos que siempre fueron atrás, y no solo impidieron pescas si no que proyectaron a los italianos a su inercia ofensiva, lo que terminó trayendo 3 tries.
Lo dijo Esteban Meneses luego del partido en conferencia de prensa: no hubo situaciones para pescar, porque el contacto siempre siempre estaba yendo hacia atrás .
La amarilla
A todo eso se generó la polémica amarilla a Vilaseca, por un golpe con el hombro a la cabeza de un jugador italiano. Una jugada coherente con el framework actual de World Rugby, pero que no pareció tener lógica en la severidad del castigo, porque el rival agacha la cabeza al ir al contacto, y Vilaseca no tenía forma de evitar eso
Lo cierto es que esa amarilla le costó 14 puntos a Uruguay: exigido por los errores de kicks y por un contacto que no había empezado a nivel, hubo que agregar el agujero, justo en el centro de la cancha, y la falta del mayor líder del plantel.
