Cada uno dijo lo suyo respecto a las perspectivas l mercado cárnico mundial y al comercio en general. Pero al llegar el momento de las preguntas, luego de las disertaciones, el canciller Rodolfo Nin Novoa acaparó el micrófono. No porque él quisiera, sino por la avidez del auditorio en el Multiespacio de la Expo Prado.
Primero reivindicó su condición de "abanderado" de la búsqueda de tratado de libre comercio (TLC), en un tono de voz como diciendo: "me extraña que no lo sepan". Y enseguida advirtió que cuando un país busca acceder a un TLC con otro –o con una región– debe dar para recibir.
Nin Novoa puso un ejemplo. "Los tamberos están preocupados por un TLC (del Mercosur) con la Unión Europea (UE) por Brasil. Si Brasil pide que entre en el acuerdo la venta de etanol a Europa y la UE pide que sus lácteos entren a Brasil, ¿qué hacemos? Solo con darle el 1% la UE nos saca de Brasil".
Luego de un silencio, el canciller enumeró los desafíos que tiene en carpeta, como la apertura de una embajada en Yakarta, la capital de Indonesia, "pero me falta US$ 1 millón" para concretarla.
Más adelante, como todas las preguntas que le hacían eran sobre temas de inserción internacional, el canciller volvió a repetir: "Para un TLC, conmigo pueden contar".
Llegó la pregunta de un posible TLC con China. De una pincelada, el canciller pintó la realidad, al decir que "sabemos que el gobierno chino no quiere molestar a Buenos Aires y a Brasil. Y Brasil le tiene miedo a la mano de obra barata de China".
Nin se ganó los aplausos del auditorio cuando defendió con énfasis la exportación de ganado en pie. Incluso señaló que hay productores que "tienen el negocio armado para destetar en el camión" los terneros. Dijo que el negocio no afecta a la industria frigorífica porque lo que se vende al exterior son "los 200 mil terneros que sobran" y remarcó que el sector criador lo integran "25 mil productores familiares, de un total de 30 mil ganaderos".
Las negociaciones entre el Mercosur y la UE cerraron la intervención del canciller en la conferencia realizada el jueves pasado en el Prado.
"Estamos negociando" con la UE en Bruselas, las ofertas entre ambos bloques se harán el 4 de octubre próximo en Brasil y "queremos al agro en el cuarto de al lado. A la industria, la producción, los trabajadores, los manufactureros. Hay que negociar como país y queremos tener el apoyo de todos. El sector privado es el que debe concretar", dijo Nin, y concluyó que "hay que ser cautos" respecto a la cuota de carne en Europa.
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