Presidente de ANV dijo que recién el 28 de abril le informaron que podían caer más de 2.500 créditos

Por eso fue sorpresa que, del lado de afuera de la sesión, quedara uno de los principales involucrados en la polémica. El presidente de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV), Klaus Mills von Mezten, optó por no ingresar a la comisión y dejó así sin explicaciones a los diputados que –sobre todo en el Frente Amplio– buscaban una explicación oficial sobre el asunto. 

Mills von Metzen, que pertenece a Cabildo Abierto y que se reintegró este mismo martes de una licencia, dio públicamente su explicación de un caso cuyo origen puede trazarse en la ley de Urgente Consideración (LUC). El artículo 463 de esa norma, aprobada en julio de 2020, bajó de 20 a 10 los años de plazo para la prescripción de hipotecas. Por el articulo 467, en tanto, se hacía cobrar vigencia esa disposición en los 24 meses siguientes. La fecha límite era el 24 de julio de este año pero, dos meses antes, nada se había hecho en la ANV para enfrentar el desafío, pese a que, pocas semanas después de aprobada la LUC, la división jurídica de la ANV advertía sobre el asunto. 

Según declaró Mill von Metzen en rueda de prensa, recién fue advertido de lo que se venía por un correo de notificación que le llegó desde la Gerencia de Créditos. Es así que, a principios de mayo, el directorio "comenzó a trabajar urgente" para definir la mejor vía de resolver el problema. El 4 de mayo fue que, por mayoría, se definió la conformación de equipo de trabajo para determinar la cantidad de créditos comprometidos y cuál sería la mejor solución disponible. Fue recién en junio, dijo, que el directorio accedió a la información: había unas 2.560 carpetas que suponían casi US$ 400 millones en créditos que podrían caer si los plazos de prescripción no se postergaban. El 85% de ellos, indicó, correspondientes a cooperativas de vivienda. 

"Investigando un poco, eso significa que durante diez años no se hizo ninguna gestión sobre esos créditos", indicó Mill, derivando parte de la responsabilidad a las gestiones de los gobiernos del Frente Amplio. 

A modo de explicación, Mill señaló los motivos por los que durante estos dos años nunca se notificó a las hipotecas con deuda. Durante la emergencia sanitaria, señaló, se optó por suspender los remates y atender las diferentes situaciones derivadas de la pandemia, con la premisa de no dejar a nadie en la calle. 

Fue a principios de mayo, dijo, que la mayoría del directorio tomó conocimiento de la existencia del informe de los servicios jurídicos. Ese informe, aseguró, fue archivado en enero de 2021 por decisión del entonces gerente general de la ANV, Gustavo Fernández Bernasconi, sin conocimiento de las autoridades. Un jerarca que, según Mill, fue removido de su cargo en abril por "varias irregularidades que no vienen al caso" y que, aclaró, no tienen relación con este tema. 

Fernández Bernasconi, según pudo saber El Observador, está al igual que Mill vinculado a Cabildo Abierto. Es además el tercer gerente general integrante de esa colectividad en pasar por la ANV desde que comenzó esta gestión. 

El asunto referido a las hipotecas se tramitó en el directorio, tal como indicó Mill, en las sesiones de los días 4, 9 y 11 de mayo. En el primero de esos días fue que se discutió el misterioso expediente archivado. Ninguna de las tres actas, según pudo corroborar El Observador, están integradas en el cronograma diario de sesiones que figura en la página web de la ANV. Consultadas, las actuales autoridades no supieron responder la razón.