Giorgia Meloni.

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Quién es la joven romana que tiene al Duce como su referente y puede ser primera ministra

La probable victoria de la candidata de derecha en las elecciones enciende las alarmas en el seno de la Unión Europea, porque Italia se convertiría en un país díscolo en el grupo de los 27
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24 de septiembre de 2022 a las 13:16

Si los sondeos no están equivocados, Giorgia Meloni tiene todas las chances de convertirse en la primera mujer en alcanzar la Presidencia del Consejo de Ministros y, con ello, ser primera ministra. Desde muy joven, con 15 años, empezó a militar en las juventudes del Movimiento Social Italiano (MSI), el partido que recogió el legado fascista de Benito Mussolini, según AFP y medios italianos. 

"Es una política posfascita. Y no es un calificativo, es la realidad", subraya Emilio Ordiz, periodista español especializado en asuntos europeos. Meloni militó posteriormente en Alianza Nacional, asimismo heredera del MSI.

En 2008, con 31 años, se convirtió en la ministra más joven de Italia durante el Gobierno de Silvio Berlusconi, que la nombró titular de la cartera de Juventud. Luego fue una de las fundadoras de Hermanos de Italia y, desde 2014, preside el partido. En 2016, se presentó a la alcaldía de Roma, pero cayó derrotada ante la coalición del Movimiento 5 Estrellas y el Partido Democrático. 

Aunque toda su vida ha estado ligada a la política, recién ahora tiene fuerte popularidad mediática. "Es una política perseverante y muy inteligente, es decir, no es una líder de derecha radical que deje cosas al azar y nunca ha sido ansiosa por alcanzar el poder", añade Ordiz, que destaca que "ha sido paciente y ha tratado de construir una imagen de moderación".

"Ahora falta ver, en el caso de que sea primera ministra, cómo pasa de estar fuera del sistema a institucionalizarse y convertir a Hermanos de Italia en un partido de gobierno”, dice Ordiz.

Meloni es hija de madre soltera y trabajó desde muy joven. Eso la pone  como una mujer común, una dirigente poco convencional que no responde a los estándares clásicos de la ultraderecha. Escribió sus Memorias, y ese libro se convirtió en best seller.

En cuanto a su programa de gobierno, es defensora de medidas ultraconservadoras en lo social y de corte liberal en lo económico. Tiene similitudes con el presidente húngaro Viktor Orban, la líder de derecha francesa Marine Le Pen en Francia y Santiago Abascal, el líder de Vox en España. También mostró alguna simpatía por el expresidente estadounidense Donald Trump.

"Dios, patria y familia", es un eslogan de su fuerza política, retomado del fascismo de los años 30. Según Meloni ese lema es "el más hermoso manifiesto de amor" y que ella es "heredera de una tradición, una cultura, una identidad y una pertenencia".

En sus reuniones masivas defiende la idea de la familia tradicional, quizá porque ella es hija de madre soltera. Pero niega los derechos de los colectivos LGTBIQ+ y los califica de "ideología de género". Respecto de la inmigración hace constante referencia al peligro de la "islamización" que, a su juicio, crece en el viejo continente.

Además, así como su compañero Mateo Salvini, quiere impulsar medidas para frenar la "llegada masiva" de inmigrantes. Entre sus propuestas están desde la clausura de puertos para evitar el desembarco de navíos de ONG que rescatan a estas personas en altamar a deportaciones o centros de vigilancia.

En política exterior quiere reformular la relación de Italia, tercera economía de la zona euro, con la Unión Europea (UE): "El de la soberanía es un debate que debemos plantear sin tener que decir que nos vamos de la Unión Europea. El tema es relevante. No es una cuestión de enemistad con Europa, sino de organizar mejor la defensa del interés nacional frente a Europa", dijo en una entrevista con la cadena 'Rai 3' durante la campaña.

En el seno de la UE miran con recelo su posible llegada al Ejecutivo junto a Salvini y Berlusconi en cuanto a temas como las sanciones contra Moscú en el contexto de la guerra en Ucrania. Sin embargo, el tono “euroescéptico” y radical de la candidata bajó de tono durante la campaña hacia una postura más moderada.

Entre otras cosas, tomó distancia del fascismo diciendo que era "historia de hace décadas" y se mostró en contra de la "privación de la democracia y las infames leyes antijudías". Asimismo, defendió que Hermanos de Italia está más alineado con "los conservadores británicos, los republicanos estadounidenses o al Likud israelí" que con otras formaciones antidemocráticas.

Para no generar muchas otras alteraciones, Meloni lleva en su programa político de coalición junto a Salvini y Berlusconi el compromiso de mantenerse alineados con la integración europea y el respeto de los compromisos con la OTAN frente al sostén a Ucrania. Sin embargo, sus socios, amigos personales y aliados políticos de Vladimir Putin, de conseguir los escaños suficientes podrían comprometer estos extremos. 

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