Luego del escándalo, vinieron los dos Nobel. La Academia Sueca anunció este jueves a los ganadores del premio Nobel de Literatura correspondientes a 2018 y 2019. La razón por la que se entregaron dos galardones juntos es que el año pasado la institución optó por postergar el anuncio ante la emergencia de un escándalo de abuso sexual que tenía como protagonista al esposo de una de las integrantes de la Academia.
El fotógrafo francés Jean-Claude Arnault fue encarcelado por violación, pero su detención acarreó una ruptura en el seno de la academia, en parte porque el centro cultural que Arnault gestionaba junto a su esposa, la poeta Katarina Frostenson, recibía dinero de la Academia y los actos sexuales fueron cometidos allí. Al francés se lo acusó además de filtrar los nombres de los ganadores.
Todo eso provocó la renuncia de siete de los 18 miembros de la institución, y una intención de mostrar con mayor transparencia sus procedimientos, hasta entonces envueltos en misterio.
Finalmente, se develaron los dos ganadores en conjunto, y a pesar de que en la discusión de candidatos figuraban nombres populares como el del japonés Haruki Murakami y la canadiense Margaret Atwood, los triunfadores terminaron siendo dos europeos.
Esto sorprende en parte porque uno de los integrantes de la Academia, Anders Olsson, había manifestado que entre los candidatos de este año buscaban apartar el foco de la perspectiva eurocéntrica que domina a los premios desde sus comienzos en 1901.
Con lo que sí se cumplió fue con la otra parte del anuncio de Olsson, que había anticipado una mayor presencia femenina. Entre eso, la abrumadora mayoría de ganadores masculinos en la historia, y con el antecedente del escándalo de agresión sexual, había elementos para suponer que al menos uno de los dos Nobel iba a estar destinado a alguna de las escritoras postuladas.
Por estos lares los ganadores no son tan conocidos como otros galardonados previamente. Este es un breve identikit de cada uno, que reúne las razones detrás de las premiaciones, y algunas obras destacadas que con seguridad llegarán pronto a las librerías uruguayas.
Polaca, 57 años, ganadora del premio correspondiente a 2018
Menos conocida en el continente que Handke (que tiene libros disponibles en el mercado), Tokarczuk fue, antes de dedicarse a la literatura, una terapeuta que trabajó particularmente con adolescentes con dificultades de comportamiento. Ese pasado como psicóloga la inspiró luego en su paso a las letras. A mediados de la década de 1990 comenzó su carrera literaria, que tuvo un rápido ascenso y la convirtió en una de las plumas más reputadas de su país. Tokarczuk no ha estado libre de polémicas en Polonia: militante de izquierda, se ha visto enfrentada con el partido Derecho y justicia, de corte conservador y nacionalista, que ha pedido que se le retiren galardones por considerar que “mancha el nombre de la nación polaca”.
El anuncio oficial de la Academia Sueca indicó que Tokarczuk recibe el Nobel “por su imaginación narrativa que representa, con pasión enciclopédica, el cruce de fronteras como forma de vida”. A lo largo de su trayectoria ha pasado por la novela, los cuentos y la poesía. Sus historias suelen estar protagonizadas por personas comunes pero tienen algunos toques fantásticos (como la presencia de ángeles o poderes psíquicos), y recorren distintos puntos de la historia y la identidad polaca, así como la relación del país con sus vecinos. Además del Nobel, ha ganado el premio Man Booker International.
Austríaco, 76 años, ganador del premio correspondiente a 2019
Nació en Austria, pero vivió desde los 2 a los 6 años en la zona de Berlín ocupada por los soviéticos, desde donde volvió a su país natal. El suicidio de su madre y el alcoholismo de su padrastro lo marcaron y ya desde su juventud comenzó a incursionar en la escritura. En paralelo a su crecimiento como escritor también se ha dedicado a la poesía y a la escritura de guiones. También ha escrito ensayos históricos que le valieron su gran polémica: su postura crítica para los ataques de la OTAN en Yugoslavia y su cercanía con el expresidente serbio Slobodan Milošević ha llevado a que se lo acuse de fascista, de defender a un régimen genocida, y ha provocado que se le retiren o se pongan en discusión algunos de los galardones que ha recibido.
“Por un trabajo influyente que con ingenuidad lingüistica ha explorado la periferia y la especificidad de la experiencia humana”, señala el comunicado oficial que lo anunció como ganador del premio Nobel. En sus obras, que le han valido el premio Ibsen y el Franz Kafka, los dilemas existenciales y los vínculos humanos son temáticas recurrentes. Por fuera de la literatura, Handke ha incursionado con regularidad en el cine: guionó El cielo sobre Berlín y la adaptación de su novela El miedo del portero al penalty ambas dirigidas por Wim Wenders. También dirigió dos películas, La ausencia y La mujer zurda.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá