La Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL) pidió este martes al Congreso Nacional de Intendentes una rebaja de 30% en la Contribución Inmobiliaria Rural para los productores lecheros de menos de 500 hectáreas índice Coneat 100.
Este planteo que se efectúa por primera vez a los intendentes fue realizado por el presidente de la ANPL, Rodolfo Braga, y el primer vicepresidente de la gremial, Walter Frisch, durante una sesión especial del Congreso Nacional de Intendentes en la Expoactiva Nacional, que se inaugura mañana en las afueras de Mercedes, en Soriano.
El petitorio fue formulado luego que los dirigentes gremiales hicieron un racconto de la difícil situación que vive el sector lechero como consecuencia principalmente de la caída de precios en los mercados internacionales que se prolonga desde hace un año. La propuesta apunta a beneficiar a unos 1.800 productores de un total de 4.000 que operan en este sector.
El tema será estudiado por los intendentes y será elevado luego al Consejo Sectorial Descentralizado que integra entre otros la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), que debería aportar los fondos necesarios para la renuncia fiscal de las comunas, explicó Frisch a El Observador.
Este planteo ocurre en un año donde las intendencias establecieron un aumento de esos aportes por IPC y otros factores. El planteo de los productores se hace solo por el año 2016, como un puente financiero para salir del momento complicado que atraviesan los productores lecheros. "Hay un entramado social en la actividad lechera y agroindustrial exportadora que está en zona de riesgo", remarcó Frisch.
Por otra parte, la ANPL recibió en la mañana de este martes al ministro de Trabajo, Ernesto Murro, en su sede central en Montevideo. El encuentro tenía por objetivo informarle acerca de las dificultades económicas del sector, especialmente con vistas a las negociaciones de la próxima ronda salarial.
Así lo informó a El Observador el segundo vicepresidente de la ANPL, Néstor Cabrera, quien señaló que el motivo fue presentarle personalmente al jerarca la situación difícil que atraviesa el sector y que el ministro conociera de primera mano los números económicos que manejan los tamberos.
Se hizo una presentación de la gravitación que tienen en un establecimiento lechero los distintos costos, entre ellos los salarios. Se trató, según se explicó a El Observador, que el ministro entendiera que "de esta situación tenemos que salir todos juntos. Por lo tanto, industria, trabajadores, productores, todos debemos tirar para el mismo lado", dijo Cabrera.
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