Una de las aves del conjunto de animales exóticos que ingresó al país de contrabando y fue incautado dio positivo de la enfermedad zoonótica clamidia. El ave, al igual que el resto de los animales incautados, permanece en cuarentena, en dependencias del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP).
Las aves ingresadas al país y trasladadas de modo ilegal, debido a que rige un estado de emergencia sanitaria por influenza aviar, iban a ser sacrificadas, con base en lo que dispone la normativa oficial, pero eso no ocurrió debido a una indicación del presidente de la República, Luis Lacalle Pou.
El ejemplar enfermo viene siendo tratado por veterinarios especializados, con antibióticos, todo en el marco de condiciones de bioseguridad dado que el tratamiento se realiza en el cuarentenario que el MGAP posee próximo al Aeropuerto de Carrasco.
El resto de los animales que permanecen con vida de los 272 que fueron incautados la semana pasada está en diferentes condiciones de estado, algunos bien, pero otros aún con riesgo de perder la vida.
Una fuente consultada por El Observador este lunes, sobre cuántos han muerto, indicó que fueron muchos y señaló que el número exacto es difícil de precisar en estos momentos.
Más allá de una elevada incidencia del factor estrés y condiciones de movilidad, incidió mucho en la tasa de mortalidad que no hubo desde el inicio del período que siguió a la incautación una alimentación eficiente, no tanto en la cantidad de comida, sí en el método de suministro, algo que con el paso de los días se fue adecuando.
Al momento solo fueron trasladados desde ese cuarentenario del MGAP a un destino definitivo algunas tortugas (no todas) y todos los erizos. Ya se encuentran en una reserva en Durazno que acciona como bioparque, no es un zoológico.
Permanecen en el cuarentenario todas las aves, todos los lagartos y parte de las tortugas.
Actualmente, a cargo de los animales, hay veterinarios especializados en animales exóticos que fueron contratados por la Unidad de Bienestar Animal de la Intendencia de Canelones.
Según otra autoridad vinculada a esta situación, este lunes se resolvió que una vez que el MGAP establezca que no hay riesgos, quien decidirá sobre el destino de los animales que quedan por ser distribuidos será la Comisión de Fauna del Ministerio de Ambiente (MA).
Una situación a resolver es que, se indicó, si bien existe la prohibición de trasladar animales a destinos que sean propiedad de privados, en este caso el sitio con mejores condiciones para recibir a la mayoría de los animales que están en el cuarentenario es justamente propiedad de un privado, y está en Colonia.
Los animales, una vez incautados en un sitio sobre la ruta 102, fueron derivados a dependencias de la Aduana (en la avenida Rondeau, en Montevideo). Luego se los trasladó al cuarentenario del MGAP, en Canelones.
Además de Aduanas y de los ministerios mencionados (con base en las unidades ejecutoras relacionadas con la temática), han participado de diverso modo en la operativa organizaciones no gubernamentales que promueven el bienestar animal, con vínculos con el Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA) del MGAP.
La mayoría de los ejemplares exóticos incautados son aves y justamente han sido las más afectadas por el estrés de los traslados desde sus sitios de origen. La mayoría de los animales que murieron son, justamente, también aves.
En el listado de aves hay loros amazónicos, cardenales, cocotillas y loritos australianos, por ejemplo. A eso se le añaden lagartos colorados de un tamaño muy pequeño, tortugas y erizos.
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