La cabaña El Chivo, de Antognazza Hermanos se llevó los mayores premios este jueves en la pista de la raza Holando en la Expo Prado (Gran Campeona Suprema, Gran Campeona PI y Gran Campeona SH), y la familia volverá a la cabaña con más que cocardas, también recuerdos, porque la vaca coronada como Gran Campeona PI se escapó mientras las autoridades de gobierno le fueron a colocar la cocarda.
El jurado estadounidense Mark Rueth nombró a la Gran Campeona y caminó hacia el animal junto al secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado; el ministro de Ganadería, Fernando Mattos; y el Presidente de la Asociación Rural del Uruguay, Gonzalo Valdés, pero luego del festejo del presentador y antes de que Delgado pudiera colocarle la cocarda roja, la vaca se escapó de su agarre y corrió unos metros.
Primero corrió hacia una esquina, luego se cruzó entre los otros ejemplares expuestos y volvió a correr. Pasaron varios minutos y varios intentos por agarrarla hasta que, ante la atenta mirada de todo el público, cabañeros que ayudaban en la pista pudieron encerrarla en el espacio reservado para periodistas, que por ese entonces estaba vacío.
Finalmente la Gran Campeona PI –que participó con el brete 616 y que además se llevó el premio a la Mejor ubre adulta PI– se acomodó junto a las autoridades y la familia, y la foto oficial salió.
Minutos después, el mismo animal fue coronado como la Gran Campeona Suprema de la raza y cerró una tarde de premios inolvidable para la familia Antognazza.
Esta fue la primera vez que esta vaca participó en la Expo Prado, contó Julio Antognazza, director de la cabaña, a El Observador, y por eso la emoción es mayor, porque le tenían mucha fe. Hace 45 días fue elegida en el tambo para participar de la exposición.
“Tiene una fortaleza lechera realmente admirable, tiene un poder impresionante. Es un poco más fuerte y más ancha en el tren anterior que la Campeona SH, creo que ahí estuvieron las ventajas. Es una vaca que se muestra un poco más entera sobre todo en la locomoción y en la fortaleza de sus patas, de la cuartilla”, detalló.
La vaca nació en la cabaña, en San José de Mayo, tiene genética 100% americana en todo su pedigrí. Ha tenido cuatro partos y “es una vaca muy productiva”, indicó el cabañero.
Forma parte de un rodeo lechero de 1.0000 ejemplares, y es parte de las vacas que están en producción actualmente, que son 850. La Gran Campeona Suprema tiene una producción de 50 litros de leche diaria.
Tras la exposición el animal volverá a la cabaña. El Chivo vende reproductores y las vacas siempre vuelven a las cabañas tras las exposiciones, explicó el propietario.
El cabañero expresó su emoción por los premios obtenidos y los dedicó a todo el equipo que día a día trabaja en la cabaña y en el tambo, a los que llegaron al Prado con animales y a los que se quedaron en San José trabajado. “Estamos realmente muy contentos. Este es un logro que tiene un trabajo muy grande atrás, estamos muy agradecidos con todos los muchachos que trabajan en la cabaña y en el tambo”, dijo el cabañero.
La cabaña El Chivo se llevó el premio a la Gran Camepona SH y a la mejor ubre con la vaca que se presentó con el brete 640, una vaca que ya tuvo siete partos.
En expoprado.com se publican los veredictos completos en cada raza y los programas de actividades ganaderas, del ciclo de conferencias y espectáculos.
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