Urrutia, al podio por sus muñecas

La clasificación desnudó una vez más las debilidades del equipo Belardi, incapaz de poner en manos de sus pilotos –Santiago Urrutia y Aaron Telitz– un monoplaza listo para pelear por la pole. No está ni cerca.

Se pudo comprobar que los trabajos previos a la tercera fecha en Indianápolis, no sirvieron de nada.

Tampoco fueron útiles, no dieron resultados, los cambios que el equipo introdujo en el Dallara del piloto oriundo de Miguelete (Colonia) tras los ensayos del día jueves donde ya se veía un panorama complicado para el joven piloto uruguayo.

Luchó, la remó, peleó hasta el último minuto de la clasificación pero no tuvo éxito: nuevamente los monoplazas del equipo Andretti dominaron la clasificación a su antojo con el mexicano Patricio O'Ward al frente en tanto Santiago Urrutia los veía ya de lejos: quinto.

Desde esa posición inició la carrera. Sabía que tenía una oportunidad, tal vez la única de intentar algo, y que esa sería en la largada.

Una vez más a su talento le añadió viveza para abordar bien por dentro la crucial curva uno, sorprender y colarse a la primera posición. Lo hizo y fue increíble. Dejó tan entreverado a sus rivales con la maniobra que el poleman O' Ward cayó al quinto lugar luchando con su compañero Colton Herta, que también se sorprendió con la maniobra del uruguayo y pasó de segundo a cuarto.

Mientras Urrutia comenzó una carrera contra sí mismo para tratar de tomar distancia, la realidad le mostraba lo contrario porque el auto no iba rápido, no tenía contundencia.

Primero aguantó a Víctor Franzoni (Juncos) y logró neutralizarlo, luego a su compañero Telitz, también con éxito hasta que apareció una tromba en la pista: Colton Herta y estos impresionantes autos que ha logrado desarrollar Andretti. Lisa y llanamente, el estadounidense le pasó por arriba al coloniense que apenas pudo soportarlo una vuelta.

Herta se escapó hasta donde quiso para ganar y Urrutia siguió penando para salvar un segundo lugar que solo puede explicarse por su talento, jerarquía conductiva y experiencia. ¿El auto? No le ayudó en la medida que lo necesita para establecer las diferencias en la pista.

Más allá del gran resultado que logró, si Belardi no le encuentra la vuelta al rendimiento de sus autos, el campeonato será muy cuesta arriba y difícil que el uruguayo pueda lograr el objetivo que culminar primero en el campeonato.

Indianápolis presenta la oportunidad de poder descontar puntos y hasta ahora, Belardi desperdició esa gran ocasión que le plantea el calendario.

Tampoco es bueno estar nada más que jugado a lo que pueda aportar el piloto uruguayo con sus talentosas muñecas en el volante.

El crédito se está agotando, lenta –como los Belardi– pero inexorablemente.

El programa del fin de semana para el piloto uruguayo se completa con la segunda carrera que tendrá lugar este sábado y que se puede ver a través de http://racecontrol.indycar.com.

EN APRIETOS

Ni la incorporación del experimentado piloto y ex tester de F1 Bruno Junqueira sirvió para paliar la crisis técnica que vive Belardi. El brasileño se puso a las órdenes de Urrutia pero el resultado fue el mismo. Es más, Belardi ya no solo tiene que lidiar con los eficaces autos del equipo Andretti sino que ahora Juncos ya está por delante de los autos rojos. Juncos Racing colocó en las últimas clasificaciones a Víctor Franzoni por delante de los Belardi y cada vez más cerca de los Andretti.

ASÍ VA EL CAMPEONATO