A tan solo 24 horas de la última prueba, la clausura de los Juegos Olímpicos de París 2024, la 'Ville Lumière' se prepara para culminar uno de los eventos más espectaculares y transformadores de su historia moderna. Durante 19 días, París ha sido el epicentro del deporte mundial, acogiendo a miles de atletas y millones de espectadores en un despliegue de competencia, cultura y celebración que ha capturado la atención global. Con la culminación inminente, es momento de hacer balance de la magnitud de estos Juegos, un evento que ha puesto a prueba no solo a los deportistas, sino también a París y, por qué no, a toda Francia.
Desde el 26 de julio, la capital gala ha vivido 27,360 minutos de competición intensa, vibrando al ritmo de los atletas más importantes del planeta. Más de 10,500 deportistas de 203 naciones se han dado cita en París, compitiendo en 32 disciplinas distintas. Esta asombrosa diversidad ha convertido a la ciudad en un mosaico de culturas, idiomas y tradiciones, haciendo de estos Juegos una auténtica celebración global. Además, el firme compromiso con la paridad de género ha sido uno de los sellos distintivos de esta edición.
El impacto de estos Juegos no se ha limitado al ámbito deportivo. París ha recibido aproximadamente a 15 millones de visitantes durante este periodo, de los cuales 2 millones fueron espectadores extranjeros. La afluencia masiva de turistas ha revitalizado la economía local, especialmente en sectores como el turismo, la gastronomía y el comercio. Las pequeñas y medianas empresas parisinas han experimentado un aumento en sus ventas del 26% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este crecimiento se ha visto especialmente en restaurantes, espectáculos, teatros y museos, donde el gasto de los visitantes ha superado todas las expectativas.
En el debate sobre la inversión y la recuperación, los datos de la red global VisaNet destacan que el gasto de los visitantes internacionales ha tenido un impacto notable en la economía parisina. Durante el primer fin de semana de los Juegos, las ventas en los comercios de París experimentaron un aumento significativo, especialmente en los sectores culturales y de entretenimiento. El gasto en teatros y museos se disparó un 159%, mientras que las ventas en restaurantes crecieron un 36% y en productos minoristas un 21%. Además, el consumo de alimentos y comestibles aumentó un 42%.
El informe también revela que el 78% de las compras internacionales en París durante los Juegos Olímpicos se realizaron a través de pagos sin contacto, mostrando un aumento del 9% en comparación con el año anterior. La mayor parte de estas transacciones provino de tarjetahabientes de Estados Unidos, que representaron el 29% de las compras realizadas en moneda extranjera. Además, se observó un crecimiento significativo en el gasto de visitantes de Brasil (+33%) y Japón (+129%).
La ceremonia inaugural, un evento sin precedentes celebrado a lo largo del río Sena, marcó el tono de lo que serían unos Juegos Olímpicos monumentales. Con 100,000 espectadores pagando entre 90 y 2,700 euros por un asiento en las plataformas más cercanas al río, la ceremonia fue un despliegue de luces, música y simbolismo que dejó momentos inolvidables a millones de personas alrededor del mundo. Esta apertura fue seguida por millones más desde las orillas del Sena, creando un ambiente de celebración, pese a la intensa lluvia, que reflejó el espíritu de unión y júbilo que los Juegos Olímpicos buscan promover.
El impacto mediático de París 2024 ha sido igualmente impresionante. Se estima que mil millones de personas han seguido las competiciones a través de transmisiones en vivo, redes sociales y otros medios, consolidando a estos Juegos como uno de los eventos más vistos de la historia. La repercusión global no solo ha elevado el perfil de París como ciudad anfitriona, sino que también ha fortalecido el vínculo entre los Juegos Olímpicos y la audiencia internacional. Para muchos, París ha logrado alejar los ‘fantasmas’ sobre su actualidad y brillar como ‘la ciudad del amor’.
Por otro lado, los Juegos Olímpicos han representado una inversión masiva de 9,000 millones de euros. Este presupuesto ha sido crucial para financiar las instalaciones deportivas, la villa olímpica en Saint-Denis, y la implementación de medidas de seguridad y logística que han permitido el desarrollo fluido de las competiciones. Esta inversión no solo ha beneficiado a los Juegos en sí, sino que también ha dejado un legado duradero en la infraestructura de la ciudad, mejorando instalaciones que seguirán siendo de utilidad para la población local mucho después de que los Juegos terminen. Más del 90% del gasto se destinó a rehabilitar estructuras existentes, en línea con un enfoque de sostenibilidad.
Uno de los aspectos más destacados de París 2024 ha sido su compromiso con el medio ambiente en la ciudad del Acuerdo Climático de 2015. Los organizadores se propusieron reducir la huella de carbono del evento, apostando por el uso de productos locales y prácticas ecológicas en todas las áreas. Durante los 19 días de competición, se han servido 13 millones de comidas a los atletas, con un 80% de los productos provenientes de la agricultura y ganadería francesas. Esta decisión no solo ha apoyado a los productores locales, sino que también ha minimizado el impacto ambiental del evento, alineando los Juegos con los objetivos globales de sostenibilidad.
La participación de los atletas en París 2024 también ha sido notable por su enfoque en la igualdad y la inclusión. Más de 500 atletas franceses compitieron en diversas disciplinas, con una representación casi equitativa de hombres y mujeres. Este equilibrio de género refleja el compromiso del Comité Olímpico Internacional con la promoción de la igualdad y la visibilidad de los deportes femeninos, que en esta edición han recibido una cobertura mediática sin precedentes.
Los voluntarios han sido otro pilar fundamental en el éxito de estos Juegos. Con 30,000 personas participando en diversas funciones, desde la recepción de espectadores hasta la asistencia a los atletas, el espíritu de solidaridad y colaboración ha sido evidente en cada rincón de la ciudad. Karina y Carlos, nuestros amigos cordobeses, han sido un ejemplo de solidaridad, amistad y dedicación, trabajando de manera anónima al servicio de atletas, delegaciones y espectadores. Estos colaboradores, muchos de ellos jóvenes, han demostrado que el verdadero corazón de los Juegos Olímpicos no reside solo en las competencias, sino en el esfuerzo colectivo para hacer posible un evento de esta magnitud.
Ahora, a un día de la clausura, París se prepara para despedir unos Juegos Olímpicos que han superado todas las expectativas, derribando los vaticinios más sombríos. Estos 19 días han demostrado que la Ciudad de la Luz no solo es capaz de organizar un evento de esta envergadura, sino que también puede hacerlo de una manera que la enriquece y deja un legado perdurable. El impacto de París 2024 se sentirá durante muchos años, tanto en la memoria de quienes participaron como en las mejoras tangibles que la ciudad ha experimentado.
En resumen, los Juegos Olímpicos de París 2024 han sido una prueba exitosa para la ciudad en tiempos donde somos más permeables a las malas noticias. En definitiva, demuestran que, con una planificación cuidadosa, un enfoque en la sostenibilidad y la inclusión, y la pasión de atletas, espectadores y locales, es posible organizar un evento que no solo celebre el deporte, sino que también promueva valores universales.
París se despide de estos Juegos con la satisfacción de haber superado con creces las expectativas, dejando un testimonio imborrable en la historia del olimpismo y en los corazones de quienes, de cerca o a distancia, vivieron esta experiencia única.
