Nacional emitió en la tarde de este domingo, sobre la hora 18.30, un nuevo comunicando realizando una actualización sobre el estado de salud del zaguero del club, Juan Izquierdo, quien sufrió el jueves un paro cardíaco en el partido que los tricolores jugaron contra Sao Paulo en duelo revancha de los octavos de final de la Copa Libertadores.
El jugador se desplomó en el campo a los 83 minutos de juego y debió ser reemplazado luego de entrar para jugar el segundo tiempo en lugar de Sebastián Coates, lesionado.
Izquierdo cayó cuando estaba sobre el círculo central y su compañero Leandro Lozano amortiguó su caída.
Una ambulancia entró rápidamente y sacó al jugador en camilla mientras los futbolistas de Nacional y Sao Paulo veían la escena con desesperación.
El jugador llegó al hospital Albert Einstein, de San Pablo, sin conocimiento.
Nacional comunicó en primera instancia, el jueves por la noche, que Izquierdo había sufrido una arritmia cardíaca.
Sin embargo, el sábado reveló, a través de las autoridades sanitarias del prestigioso hospital de San Pablo, que el jugador había padecido un paro cardíaco.
Desde entonces permanece en estado de coma en el centro de cuidados intensivos del hospital.
Este domingo, el boletín médico emitido por el hospital expresó: "Internado desde el 22 de agosto de 2024, a las 20:55, el paciente Juan Manuel Izquierdo fue sometido a nuevos exámenes este domingo, 25. La evaluación mostró una progresión del compromiso cerebral y un aumento de la presión intracraneal. Juan sigue en cuidados intensivos neurológicos, dependiente de ventilación mecánica".
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El último comunicado sobre Juan Izquierdo
El comunicado fue firmado por Dr. Marcos Vinicius Tadao Fujino, neurólogo en el Hospital Israelita Albert Einstein, dr. Carlos Vicente Serrano Junior, cardiólogo en el Hospital Israelita Albert Einstein y el dr. Miguel Cendoroglo Neto, director médico del Hospital Israelita Albert Einstein.
Si bien el comunicado habla de "progresión" del "compromiso cerebral" lo que eso significa es que el paso de las horas ha determinado, con los estudios realizados, que el cerebro se vio comprometido por el tiempo en que no recibió oxígeno por parte del corazón, cuando este estuvo en paro.
Eso, además, se traduce ahora en un aumento de la presión intracraneal, lo que agrava su situación.
Por esa razón, el futbolista permanece sedado y con "ventilación mecánica", es decir con una máquina que le permite respirar.
