A once días de la Convención que elegirá el nuevo presidente, los movimientos en el Partido Nacional no cesan. La mayoría de los candidatos coincidieron en un homenaje en el puerto a 41 años del regreso de Wilson Ferreira, un rato después que los directores tuvieran la última sesión antes de las elecciones.
Además del carácter simbólico, el encuentro del Directorio en la sede de la Plaza Matriz estuvo marcado por un planteo político realizado por el senador Carlos Camy.
En representación de Alianza País –grupo que impulsa a Javier García–, Camy propuso que los candidatos fueran en un “sublema único” para asegurar que el más votado termine siendo el presidente.
Camy dijo a El Observador que el planteo –realizado previamente en la Secretaría de Asuntos Políticos– fue ante la necesidad de que el nuevo presidente (y todo el Directorio) tenga la mayor “representatividad” y “legitimidad política”.
A su entender, si los candidatos van todos en un mismo sublema –algo similar a lo que hicieron los sectores en las elecciones nacionales de octubre de 2024 cuando compitieron bajo el paraguas Uruguay para adelante– se evita que se configure la hipótesis de que el nuevo presidente surja sin ser el candidato individual más votado.
“Puede pasar que quien salió segundo en votos individuales sea el presidente por el sublema”, dijo y consideró que si bien era legítimo –porque está en la carta orgánica– ese presidente carecería de la mayor “legitimidad política”.
Al justificar la propuesta, Camy consideró que el nuevo Directorio va a ser de los “más importantes” de la historia del Partido Nacional porque tendrá tres tareas principales: planificar y dirigir el retorno al poder en 2029, definir cómo competir con la coalición –si con un nuevo lema o no– y analizar las causas de la derrota de 2024.
Según supo El Observador, el director Santiago Gutiérrez compartió “el fondo” de la preocupación aunque estuvo en desacuerdo con el “sublema único” porque perjudica a los que tienen menos votos.
El artículo 21 de la carta orgánica establece que la “presidencia del Directorio será desempeñada por el primer titular de la lista más votada dentro del sublema más votado”.
También señala que los miembros del Directorio serán elegidos por el sistema de representación proporcional integral. “Si hubiera más de una lista, la distribución de los cargos de miembros del Directorio obtenidos por diferentes sublemas, se hará también proporcionalmente al número de votos emitidos a favor de las respectivas listas, las que acumularán sus votos en los respectivos sublemas”, dice.
La presidenta del Directorio, Macarena Rubio, dijo que el planteo se iba a procesar pero señaló que también había sido conversado en “otra reunión”.
Fuentes blancas dijeron que esa otra instancia a la que aludió Rubio fue un encuentro el viernes en el que participaron los cuatro candidatos: Álvaro Delgado, Javier García, Luis Alberto Heber y Carlos Enciso.
En esa reunión se resolvió que antes de votar hablara el expresidente Luis Lacalle Pou y los candidatos dieran un mensaje, pero no se definió el tema de los sublemas ya que no hubo consenso. Los informantes dijeron que Enciso y Heber se mostraron partidarios de ir en sublema único mientras que Delgado fue reticente.
De hecho, el líder de Aire Fresco es –hasta ahora– quien viene desarrollando una estrategia electoral de acumulación por sublema, ya que además de su lista el paraguas también incluye a De Centro, aunque este sector aún no resolvió quién encabezará la lista. Una opción es que sea Delgado y otra es que sea Nicolás Olivera (intendente reelecto de Paysandú).
En rueda de prensa, Rubio reconoció que vivían “momentos especiales” a nivel partidario. “Hay competencia, unidad no significa hegemonía. Esta pluralidad de voces enriquece nuestro partido”, señaló.
A su vez, dijo que era necesario “reorganizarse y fijar objetivos claros” porque tenían “vocación de gobierno”.
Por último, planteó que al próximo Directorio le corresponderá el análisis de la derrota o autocrítica, algo que era “muy difícil” en una convención de 500 personas porque no se escucharían todos.
