“Me siento triste por defraudar a tantos compañeros y compañeras”, “nos hubiera gustado que el Frente Amplio tuviera algún punto más”, “la barra pide más”, “hicimos lo que pudimos”, “teníamos una expectativa superior para nuestra propia lista”. Aunque Yamandú Orsi parte hacia el balotaje con cierta ventaja sobre Álvaro Delgado, en el Frente Amplio son más los defraudados que los satisfechos con la votación del domingo, y así lo demuestran casi todos los pronunciamientos que se han hecho desde la izquierda.
Seregnistas perdió dos senadores y varios diputados, la “lista de Carolina” Cosse (La Amplia) no hubiera llegado con votos propios al Senado si no fuera por la ingeniería electoral de sus socios, el Partido Comunista tuvo menos adhesiones que en 2019 y no pudo ampliar su bancada, el Partido Socialista perdió todas sus diputaciones, el exsenador Rafael Michelini consiguió solo 2.500 adhesiones en su intento por salir electo diputado, quedaron lejos de los votos para llegar al Parlamento el intendente Andrés Lima, el exdirector de OPP Álvaro García o el exintendente Christian Di Candia.
La lista de objetivos no cumplidos dentro del FA es larga. Con contadas salvedades, la más grande excepción a ese estado de ánimo es la del Movimiento de Participación Popular.
La 609 de José Mujica, Alejandro Sánchez y Blanca Rodríguez tuvo por sí sola más votos que todo el Partido Colorado y ganó para el próximo período la misma cantidad de senadores que todo el Partido Nacional. El 70% de las bancas del Frente Amplio en el Parlamento la próxima legislatura van a ser del MPP.
Presentación de Blanca Rodríguez, espacio 609. Alejandro Sanchez, Blanca Rodríguez, José Mujica.
Foto: Leonardo Carreño.
“¡Vecino, vecina, llegó la lista del ‘Pepe’!”, anunciaban los militantes en cada barriada para esta lista que, aunque ya no tuvo como candidato a Mujica y que renovó en el Parlamento a importantes dirigentes del recambio generacional, todavía no se ha enfrentado a las urnas sin la omnipresencia de quien sigue siendo, según las encuestas, el político más popular del país.
Hegemonía del MPP
Con nueve de 16 senadores y al menos 36 de los 48 diputados frenteamplistas –la de Treinta y Tres depende de los votos observados–, la hegemonía emepepista ya es motivo de conversación en su Ejecutivo nacional, según reconstruyó El Observador. En filas mujiquistas sostienen que serán “cuidadosos” con la posición dominante y que nunca han “avasallado” pese a ser mayoría.
Orsi ha dicho que la votación por sectores tendrá “influencia relativa” a la hora de armar gabinete si es gobierno, aunque sin ser “una proporcionalidad”. Mujica, en tanto, ya venía declarando que esto les implica mayor “responsabilidad”. “El tener muchos también te crea problemas. (...) Tenemos que ayudar a atemperar las contradicciones que van a saltar”, dijo semanas atrás a El Observador.
La hegemonía del MPP se va a traducir además en la caja de la que el sector va a disponer para hacer política, fortaleza que hoy distingue a la organización y que con esta representación se robustece de manera significativa.
Todos los legisladores del MPP tienen hoy topeado su sueldo en $90 mil líquidos, confirmaron a El Observador sus dirigentes. El resto de la remuneración –que con los aportes correspondientes queda en un estimado $289.865 en la mano para senadores y diputados– la retiene el MPP. Solo por este concepto, la organización recaudaría por mes unos $6,7 millones en Diputados y cerca de $1,4 millones en el Senado.
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La Cámara de Diputados continúa hoy con la votación de la Rendición de Cuentas
D. Battiste
A esto se suman los pagos por partida de secretaría que le corresponden a cada despacho y que en el caso del MPP, según supo El Observador, también los centraliza la organización. Con partidas de $207 mil por cada diputado, en esa cámara van a recaudar otros $7,2 millones mensuales. En el Senado, las partidas totalizan casi $1,6 millones mensuales más otros $375 mil para secretaría del sector.
En resumen, con las dos cámaras sumadas, el MPP va a recaudar poco más de $17 millones por mes. Por año, van a ser $206 millones. Convertido a valor actual, equivale a casi US$ 5 millones por año.
Todos estos números sin contar las bancas electas por la 609 a ser ocupadas por dirigentes no emepepistas: Cristina Lustemberg y Blanca Rodríguez en el Senado, Fernando Amado y Federico Preve en Diputados. Son cálculos a la baja en el caso de los últimos tres, ya que de renunciar sus titulares las bancas quedarían en manos de emepepistas que sí se rigen bajo las reglas de la organización, así como también los ingresos por sesiones en las que participen sus suplentes.
Tampoco se consideran los aportes de eventuales cargos de gobierno o transferencias de la Corte Electoral por cada voto.
"Arrancan ganando 5 a 0"
Parlamentarios del MPP consultados para esta nota explicaron a El Observador que su actividad tiene varios gastos permanentes de los que se hace cargo la organización: un auto para cada bancada, una renta mensual para secretarios de despacho, encargados de prensa, devolución de costos por viajes al interior, coordinadores de bancada, una casa en el centro de Montevideo acondicionada para diputados del interior, entre otros.
Por otro lado, solo el MPP tiene la potestad de tener más de 200 funcionarios en pase en comisión trabajando para el Parlamento, por más que –como ya sucede en la actual legislatura– casi ninguno usa la totalidad de los cupos a disposición.
“Arrancan ganando 5 a 0”, ironizó un dirigente frenteamplista de otro sector preocupado por la asimetría de poder con la 609.
El Frente Amplio con Orsi tuvo 100 mil votos más que con Daniel Martínez. Solo el MPP creció en 150 mil adhesiones respecto a su anterior elección, mientras casi todos los sectores mayoritarios mantuvieron su votación y hasta perdieron respaldo. Dos de cada cinco votos en la coalición de izquierdas fueron a la 609.
“Creo que la gente como que terminó asociando el número 609 con el partido”, reflexionó Daniel Chasquetti en En Perspectiva. “Como que votar al FA era votar a la 609”.
