Imputaron a diez jugadores de Deportivo Italiano y un futbolista de Mar de Fondo por los incidentes en el partido que disputaron ambos equipos el domingo 8 de setiembre, en el que dos deportistas terminaron lesionados, informaron fuentes de Fiscalía.
Los líos entre Mar de Fondo y Deportivo Italiano
Luego de que Mar de Fondo ganara sobre la hora el partido, correspondiente a la Primera División Amateur (también conocida como "la C"), los futbolistas de ambos equipos comenzaron una pelea que duró varios minutos y recorrió buena parte del estadio José Pedro Damiani.
Los incidentes llegaron a la platea principal y el periodista Gustavo Rodríguez, estaba transmitiendo lo que veía. Un futbolista de Deportivo Italiano lo vio transmitiendo en vivo y le fue a quitar el micrófono y a apagar la consola, cosa que el periodista intentó que no sucediera, pero finalmente se la cortaron.
La mayoría de los jugadores de Deportivo Italiano fueron contra Lucas Suárez, hijo del exfutbolista de Danubio Edison Suárez. Según dijo una fuente a Referí, estaban molestos con él porque les gritó "el gol en la cara cuando se terminaba el partido".
Suárez terminó con lesiones en la cara, pero la peor parte se la llevó Michael Viera, de 20 años, quien estuvo internado e intubado durante días por las heridas sufridas en la gresca.
El caso fue derivado al fiscal de Flagrancia Fernando Romano por su experiencia en casos de violencia en el fútbol. Este jueves, a pedido del fiscal la justicia imputó a once jugadores por los hechos por el delito de riña en espectáculos deportivos, diez de ellos de Deportivo Italiano.
Además, uno de los futbolistas de Italiano también fue formalizado por un delito de violencia privada, responsabilizado por cortar la transmisión del periodista tras el encuentro.
Los implicados deberán fijar domicilio y no podrán salir del país ni acercarse a las víctimas por 150 días, detallaron desde Fiscalía. Además, el expediente fue trasladado a la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) para que los futbolistas sean incluidos en la lista negra.
Fuentes del organismo aclararon que la formalización no afectará el derecho a trabajar. Podrán ir a entrenar y jugar los partidos, pero no podrán asistir a otros espectáculos deportivos, incluso a aquellos de su equipo en los que no estén convocados.