Este lunes por la mañana, en el Palacio de La Moneda en Chile, el presidente de la República, Yamandú Orsi, se reunirá con los mandatarios de Chile, Brasil, Colombia y España en el llamado "retiro" de presidentes progresistas. Previo a este encuentro, los gobernantes difundieron una editorial bajo el titular "Democracia siempre".
Este artículo fue publicado en las últimas horas en el apartado de opinión del medio chileno, El Mercurio, con la firma de los cinco jerarcas.
Allí, los presidentes definieron a la democracia como el "mejor camino" para la paz y también para lograr una adecuada "cohesión social" entre las personas.
"Es con más democracia como crearemos más oportunidades para las generaciones futuras, y como mejor nos adaptaremos a los retos globales que suponen la inteligencia artificial o el cambio climático. Resolver los problemas de la democracia con más democracia, siempre", señalaron.
Este encuentro, que fue impulsado por los gobiernos de Brasil y España durante la Asamblea General de las Naciones Unidas del año pasado, representa una "iniciativa que busca defender la democracia como un bien común", aseguran.
"Hoy nos reúne la certeza compartida de la necesidad de mejorar la respuesta del Estado a las demandas de nuestros pueblos y gobernar con eficacia, con justicia, con derechos, con democracia siempre. Y con la convicción de que defender la democracia en estos tiempos difíciles no es solo resistir y proteger, sino proponer y seguir avanzando", sostuvieron.
Orsi asistirá a este cita acompañado del secretario de la Presidencia, Alejandro Sánchez, el canciller Mario Lubetkin y los asesores presidenciales Álvaro Padrón y Camilo Cejas.
La editorial de los mandatarios previo al encuentro en Chile: "Democracia siempre"
En distintos rincones del planeta, la democracia enfrenta un momento de grandes desafíos. La erosión de las instituciones, el avance de los discursos autoritarios empujados desde distintos sectores políticos y la creciente desafección ciudadana son síntomas de un malestar profundo en amplios sectores de la ciudadanía. A ello se suman las persistentes desigualdades, el retroceso en derechos fundamentales, la difusión de desinformación y discursos de odio en plataformas digitales, y la expansión de redes criminales que desafían la legitimidad del Estado.
Ante este escenario, no cabe el inmovilismo ni el miedo. Defendemos la esperanza. En un mundo cada vez más polarizado, como líderes progresistas, tenemos el deber de actuar con convicción y responsabilidad frente a quienes pretenden debilitar la democracia y sus instituciones. Porque no basta con evocar la democracia ni hablar en nombre de ella: debemos fortalecerla, renovarla y hacer que vuelva a ser significativa para quienes sienten sus promesas incumplidas. Es con más democracia como crearemos más oportunidades para las generaciones futuras, y como mejor nos adaptaremos a los retos globales que suponen la inteligencia artificial o el cambio climático. Resolver los problemas de la democracia con más democracia, siempre.
Ese es el principio que convoca a los gobiernos de Chile, Brasil, España, Uruguay y Colombia a la Reunión de Alto Nivel "Democracia Siempre", a celebrarse en Santiago este 21 de julio.
Este esfuerzo compartido no es solo la continuación del encuentro impulsado por los gobiernos de Brasil y España, durante la Asamblea General de las Naciones Unidas del año pasado, sino que da un paso más. Porque lejos de ser un gesto aislado o simbólico, es una iniciativa que busca defender la democracia como un bien común.
Sabemos que las democracias no se construyen solo desde los gobiernos. Construir propuestas conjuntas y eficaces que fortalezcan la cohesión social, la participación ciudadana y la confianza en las instituciones es un trabajo que no puede reducirse a cartas de buenas intenciones o recaer solo en los gobiernos de turno y sus representantes. Por eso, esta iniciativa convoca también a organizaciones sociales, centros de pensamiento, juventudes y actores diversos de la sociedad civil, porque su participación y acción es fundamental para que la democracia recupere su capacidad transformadora.
Sabemos también que defender la democracia exige que seamos capaces de condenar las derivas autoritarias y, a la vez, hablar en positivo, proponiendo reformas estructurales para enfrentar la desigualdad en nuestros países y el mundo. La historia nos ha demostrado una y otra vez que la democracia es el mejor camino posible para garantizar la paz, la cohesión social y las oportunidades para todos. Impulsar estrategias comunes en favor del multilateralismo, el desarrollo sostenible, la justicia social y los derechos humanos resulta un imperativo ético y político. Porque la democracia es frágil si no se cuida
Hoy nos reúne la certeza compartida de la necesidad de mejorar la respuesta del Estado a las demandas de nuestros pueblos y gobernar con eficacia, con justicia, con derechos, con democracia siempre. Y con la convicción de que defender la democracia en estos tiempos difíciles no es solo resistir y proteger, sino proponer y seguir avanzando. Esa es la tarea urgente de nuestro tiempo.