¿A Nacional le alcanza solo con Amaral para ganarle a Estudiantes por la Libertadores?

Un rato después, el otro caño le devolvió a Amaral la pelota del tercer gol tras un disparo a colocar tras asociarse con Castro. Durante 30 minutos, la influencia de Amaral (con Castro como socio perfecto) en el equipo de Gustavo Munúa fue desequilibrante en el Parque Viera. Cuando el 10 se cansó, Wanderers le empató el partido 2-2.

Es inobjetable que el volante de Nacional es un futbolista diferente, con una visión de juego y una pegada envidiables. Pero después de nueve meses de recuperación de una grave lesión (rotura de ligamentos de la rodilla) todavía no mantiene un ritmo alto durante los 90 minutos.

En el plano internacional, el joven de 22 años jugó poco (cinco partidos incompletos en Sudamericana y Libertadores), aunque dejó su marca de calidad: en la Libertadores del año pasado clavó un gol de tiro libre frente a Cerro Porteño en el Gran Parque Central, que fue comparado con otro que hizo Lio Messi para Barcelona frente al Liverpool en la Champions.

La semana pasada no integró la delegación a Lima, pero después de su reaparición como titular el domingo en el Prado, marcando el ritmo del equipo mientras tuvo piernas, es una carta que Munúa no puede dejar en el mazo este jueves frente a Estudiantes de Mérida por la segunda fecha del grupo F de la Libertadores. El partido comienza a la hora 19 en el Gran Parque Central.

La pregunta es: ¿le alcanza a Nacional solo con Amaral para salir de este momento de incertidumbre futbolística? Este año el tricolor disputó cuatro partidos oficiales, de los que solo ganó uno, frente a Alianza Lima (1-0) en el arranque del grupo F de la Libertadores. 

Después perdió contra Liverpool (2-4) por la Supercopa, ante Rentistas (0-2) y empató contra Cerro Largo (2-2) y Wanderers (2-2) por el Apertura.

¿Dos o tres volantes?

El tema es que Nacional sufrió en los últimos encuentros la floja recuperación en la mitad de la cancha. Habitualmente Munúa forma el equipo con dos volantes mixtos, que no tienen como principal característica la recuperación de la pelota. Cuando los rivales pasan esa línea, los que sufren son los defensores.

Felipe Carballo es el único que fue titular en los cinco partidos, acompañado indistintamente por el juvenil Joaquín Trasante, Claudio Yacob y Gabriel Neves. Salvo Trasante que es un futbolista más dedicado a la marca, los demás son de ocupar espacios y salir de atrás con la pelota bien jugada. 

Por ahora Munúa se resiste a poner un tercer volante, que podría ser una solución para que el equipo gane en confianza. En su anterior ciclo como técnico tricolor, en la temporada 2015/2015, fueron contadas con los dedos de una mano las veces que incluyó a un tercer mediocampista. 

Contra Peñarol en el Apertura 2015 formó un mediocampo combativo, con Santiago Romero, Sebastián Eguren, Gonzalo Porras y Mathías Abero. El resultado fue un empate 1-1, resultado que le sirvió en ese momento al conjunto aurinegro, entonces dirigido por Pablo Bengoechea.

También jugó con tres volantes (Porras, Romero, Carballo) en aquel partido contra Boca Juniors en la Bombonera, por cuartos de final de la Libertadores 2016. Empataron 1-1 y después perdió por penales. Es decir que los antecedentes tampoco marcan una tendencia positiva, para que el técnico albo se incline a jugar con tres en el medio.

Este jueves frente a Estudiantes, volvería a jugar con Neves y Carballo, como en Lima ante Alianza.

El retorno del equipo al Gran Parque Central es otro aliciente para los hinchas. Jugó por última vez el 7 de noviembre pasado frente a Fénix. Por la Copa lo hizo el 24 de julio último contra Inter de Porto Alegre. En ese partido ya estaba lesionado Amaral. Ahora volvió y es la esperanza tricolor.