"Estoy desesperado por pegar otro Cinco minutos"

El 2014 fue el año de Lucas Sugo. A fuerza de su hit Cinco minutos, el cantante oriundo de Tacuarembó llegó a todos los boliches del país e incluso trascendió fronteras con aquel tema. Tres años después, Sugo no ha podido encontrar un nuevo "gol de chilena", como definió a aquel hit, pero sí se ha consolidado como uno de los exponentes de la música tropical nacional. A pocos días de que se presente por primera vez en el Auditorio del Sodre, Sugo habló con Patricia Madrid El Observador TV sobre el show –que ya agotó entradas para su primera fecha–, el éxito tardío y sobre aquellos Cinco minutos, el tema que lo puso en el mapa de la música local, pero también le acarreó problemas de depresión.

Es el puntapié inicial de un nuevo tour, un nuevo formato artístico. Viene la temporada de festivales grandes y tenemos que generar cosas nuevas. No puedo hacer más de lo mismo, no puedo venir con "la viola" y Cinco minutos. Es la primera vez que voy a hacer un espectáculo ahí. Ya he tocado, pero es la primera vez que voy a hacer mi espectáculo en el Sodre. Y hay una comunión de cosas muy gratas: la parte profesional que tiene que estar, que es el nuevo concierto que vamos a presentar y con el que vamos a estar girando por todo el país; pero también lo simbólico, que es llegar a ese recinto en ese marco artísticamente tan bonito con nuestra música, nuestro movimiento que viene del interior.

Vamos a tener invitados y voy a presentar temas nuevos. El 22, además, vamos a grabar el DVD y va a estar Jorge Rojas cantando con nosotros. No puede estar el 15 por temas de agenda, pero para ese día también tenemos sorpresas. Y en cuanto a la música, se van a encontrar con un resumen de todo lo que vengo haciendo en estos años de "trillar" por el interior. También van a estar las canciones que me identifican como Cinco minutos, Llueve lluvia llueve, pero le vamos a dar otra impronta. Apostamos a un espectáculo muy jugado desde el punto de vista artístico. Va a estar lleno de pantallas, va a llamar mucho la atención desde lo visual.

No, siempre tuve las puertas abiertas. Incluso leí lo del Fata (por el episodio entre el Fata Delgado y el Teatro Solís) y me apenó muchísimo. Ahora sé que va a ir al Solís y me pone muy feliz. Siempre vi miradas de respeto a lo mío desde el 2014. Antes no me conocían. Muchas veces los del interior antes de golpear una puerta ya estamos con ese paso atrás de decir "no me van a abrir", y nos olvidamos de golpear y ver qué pasa. Hoy vemos el reconocimiento de los medios capitalinos. Eso también hace que las puertas se abran.

Los años me sirvieron para dos cosas. Primero, para tener la experiencia de subir al escenario desde los 14 años. Eso te permite tener aplomo y conocimiento de la causa. Segundo, y más importante aún, fue que me costó tanto llegar a este lugar con más de 20 años de carrera, que se lo valora en su máxima expresión. Lo valoro mucho, lo cuido mucho con trabajo y seriedad.

Noto que lo mío viene por el lado de lo popular, y vino muy de abajo porque yo no vengo de una familia de muchas oportunidades. Vengo del interior y en el interior las oportunidades son muy escasas, es todo cuesta arriba. Veíamos el éxito distante, y por eso costó tanto y lo valoro tanto. Ahora veo que soñar es posible en este país. Aunque mires y la veas brava, sin salida, hay que seguir.

Estoy desesperado por pegar otro Cinco minutos, por hacer otro gol de chilena. Pero si no viene no importa, o si el gol me pega en el hombro y entra. Lo importante es hacerlo. El problema del hit es que se esfume y que no se sostenga por lo que sos desde el punto de vista artístico. En 2014 tuve problemas de depresión, porque era el momento de exposición más alto en los medios. Sabía que los sábados de noche mi canción sonaba en todo el país y en vez de estar festejando estaba triste. Pasé varios meses muy preocupado, pensando que no se iba a repetir, y fue así que entre en depresión.

Después la gente me fue sacando la negatividad, y tuve respaldo puro y sincero. Cinco minutos fue la puerta que se abrió para que la gente entrara y pudiera ver el mundo artístico del "tal Sugo". Ese público fiel es el que busco y que me sostiene, que me respalda y me apoya. Hoy estoy tranquilo. Estoy desesperado por hacer otro hit y si puedo bienvenido sea. Pero también estoy feliz y tranquilo porque hay un respaldo popular importante que me permite poder seguir en este camino expresando todo lo que quiero expresar.