Rusia 2018 > MUNDIAL

Aislar a Cristiano y William: las claves tácticas de un triunfo memorable

La imponente técnica de marca y la capacidad para sacarle jugo al balón largo pusieron a Uruguay en cuartos
Tiempo de lectura: -'
02 de julio de 2018 a las 05:00
En un partido dramático donde la pasión estuvo por encima del análisis, bien vale repasar cómo se gestó uno de los triunfos más festejados en un proceso de 12 años de selección.
Como ante Rusia, Uruguay volvió a ganar desde la estrategia del entrenador que planificó el partido a partir del potencial de Portugal y controló el ritmo de juego durante buena parte del partido resignando voluntariamente la tenencia de la pelota.

De adelante hacia atrás (siempre hay que analizar la defensa de Uruguay a partir del solidario despliegue de Edinson Cavani), Uruguay buscó perturbar la salida limpia desde el fondo rival y lo llevó a su terreno. La segunda pelota.


El control a William


Tabárez buscó controlar el primer pase de William, el 14 en el doble 5, y lo logró con la aplicación táctica de Cavani y el adelantamiento de Rodrigo Bentancur. Primera batalla ganada.
Cuando la pelota cayó en su terreno, dispuso una telaraña de piernas con gran capacidad de recuperación.


Las bandas

Uruguay portugal
undefined

Lucas Torreira de volante central y dos laderos (Nahitan Nández por derecha y Matías Vecino por izquierda) que se movieron como un fuelle doblando la marca para asistir a los laterales y achicando espacios al medio cada vez que los europeos recirculaban el balón hacia el callejón central.
La defensa jugó plantada y concentrada durante los 98 minutos que duró el juego. Protegió el área por arriba con una precisión única y cortó centros cruzados por abajo toda la noche formando, además, un segundo bloque de contención detrás de los volantes para levantarle una muralla al tiro de media distancia rival.

Los laterales fueron impermeables. Martín Cáceres jugó un partidazo -el mejor en mucho tiempo- controlando a quien es hoy uno de los mejores laterales izquierdos del mundo: Raphael Guerreiro, autor del centro del gol en un córner corto.

Por izquierda, Diego Laxalt tuvo una actuación consagratoria desde la intensidad de la marca, la presencia en el uno contra uno y la capacidad aeróbica.


La marcas a CR7

Cristriano Ronaldo con compañeros de Portugal
undefined

¿Cómo se marcó a la bestia de Cristiano Ronaldo? Fue la gran clave de las claves. La maquinaria defensiva le retaceó abastecimiento.

Cuando retrocedió y buscó rematar, lo bloqueó Torreira toda la tarde con una actuación que le dio su carta definitiva de presentación al mundo entero.

Cuando buscó el área para conectar centros, aparecieron los centrales para anularlo. Así y todo fue determinante en el gol. Arrastró a Giménez y Godín liberando a los centrales. Uno de ellos, Pepe, conectó primero y empató.

Por último, cuando se tiró por izquierda y encaró en diagonal lo escalonaron Cáceres, Nández y Torreira.

Sin dudas que hoy en día es el mejor jugador del mundo. Pero a eso le suma un gran amor propio por la camiseta de su país y una capacidad de liderazgo para con sus compañeros que potencia a todo el equipo.

En el segundo tiempo, Portugal fue tromba con los laterales como dobles punteros, tres puntas fijos y un Bernardo Silva que condujo con insistencia por adentro para intentar abrirle brechas a la muralla.
Ahí quedó patente la gran técnica destaca de un equipo que cometió sólo cinco faltas en el segundo tiempo y que marca con tanta suficiencia, velocidad y calidad que determina que la posibilidad del VAR solo le haya revisado una jugada al final en la que hubo mano del golero portugués en el área celeste.


El ataque

uruguay portugal
undefined

Toda esta operativa sería insuficiente si Uruguay no tuviera el peso ofensivo que tiene.
Tabárez determinó jugar en largo desde el fondo para un Luis Suárez que realizó el trabajo sucio: Anestesiar el juego, cuerpear rivales, forcejear, sacar faltas, consumir segundos en el piso.
Cuando pudo jugar fue determinante con la asistencia del primer gol. También le dio otra al Cebolla Rodríguez que llegó muy forzado y no pudo definir.

¿Y qué decir del Edinson Cavani delantero? Que jugó su mejor partido con la selección uruguaya. Por su aporte y el contexto. Que metió dos goles memorables. Que bajó muchas pelotas dándole buen destino y que, como siempre recuperó un montón con ese generoso y conmovedor despliegue defensivo.

En sus acciones de ataque directo y vertical, Uruguay volvió a mostrarse fuerte. La primera jugada es el manual de transición de Tabárez. Cinco pases para anotar un gol en tiempo de un 100 metros llanos en final olímpica.

Y el segundo es una clara muestra de que equipo es capaz de sacarle jugo a una acción tan elemental como el pelotazo de Fernando Muslera.

Para eso se aprovechó un mal despeje rival (como en el 2-1 a Inglaterra a Brasil 2014), pero también se le sumó la cuota de talento. Y eso fue lo que aportó Rodrigo Bentancur. La pausa y el pienso para el primer gol descargando con Cáceres que verticalizó. El pase mágico para un Cavani que olió la jugada antes como solo los elegidos pueden hacer.

Así ganó Uruguay. Y ahora lame sus heridas para preparar otra batalla con Francia. Hay que recargar alma y corazón.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...