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Bella Unión: del Parlamento a la Justicia
La comisión investigadora cerró el primer capítulo vinculado a la empresa de traslados Siemm; la oposición ratifica sus sospechas, pero ASSE no actuará hasta que se dicte una sentencia judicial
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05 de diciembre de 2017 a las 05:00
"No vamos a dejar a un director procesado, pero no me quiero adelantar: el que se precipita, se precipita", afirmó el gerente general de ASSE, Richard Millán, en el Parlamento. El lunes 27, cuando se cerraba el capítulo Bella Unión en la comisión investigadora de Diputados que indaga presuntas irregularidades en el organismo, el jerarca dejó en claro que no tomará medidas con los tres directores de hospitales que son dueños de la firma de traslados Siemm hasta que no se expida Crimen Organizado.
La frase de Millán deja en evidencia las limitaciones que tiene la investigadora. Aunque la comisión sirvió para probar ciertas irregularidades que habían sido denunciadas por la oposición, en ASSE están decididos a no tomar medidas hasta que la Justicia no marque el camino. "A mí me enseñaron que todo el mundo es inocente hasta que se demuestre lo contrario", señaló el gerente.
Además del ruido político y mediático, en el corto plazo la investigadora tiene pocos efectos. Consciente de esta realidad, el legislador del Partido Colorado Ope Pasquet elevó una moción para dejar a disposición de la Justicia todas las actas de la comisión. Esa es la única alternativa que tienen los diputados de incidir en el proceso judicial en este momento.
Una vez que termine la comisión –a mediados de 2018– los integrantes elaborarán un informe sobre lo investigado. Ese documento podría derivar en una denuncia penal. Pero hasta que la Justicia no se expida, los dueños de Siemm seguirán en sus puestos: Federico Eguren como director del Hospital Pereira Rossell, Rodrigo Barcelona como director del hospital pediátrico de ese centro, y Marcos García al frente del Hospital de Salto.
Lo que probó la investigadora
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La entonces ministra de Salud Pública, Susana Muñiz, y la entonces presidenta de ASSE, Beatriz Silva, en la inauguración de Siemm en 2013
Se podía hacer y era más barato
Uno de los argumentos de la actual presidenta de ASSE, Susana Muñiz, para justificar la contratación de Siemm eran los costos. Según Muñiz, el Hospital de Bella Unión no contaba con los recursos para prestar el servicio y la tercerización era la opción más barata. Sin embargo, los números dicen lo contrario. Mientras que en 2016, el hospital pagó $ 16 millones a Siemm, en 2017 prestó el mismo servicio con recursos propios, a un costo de $ 13 millones.
Recetas de un lado y del otro
Varios médicos que trabajaban tanto en Siemm como en ASSE recetaban medicamentos a usuarios de la emergencia móvil privada para que los retiraran en el hospital público. Así lo reconoció la química farmacéutica del hospital, Adriana Ferreira. Rodrigo Barcelona, uno de los dueños de Siemm, admitió que era una práctica indebida.
Advertencias previas
Varios jerarcas de ASSE y del gobierno estaban al tanto de que la empresa Siemm estaba compuesta por tres jerarcas del organismo. Beatriz Silva y Susana Muñiz (anterior y actual presidenta de ASSE) concurrieron a la inauguración de la empresa. Marcos García (uno de los tres dueños de la emergencia) envió una carta a sus superiores advirtiendo acerca del posible conflicto de intereses, pero sus palabras fueron ignoradas.
El rol de Susana Muñiz
El predecesor de Susana Muñiz en el Ministerio de Salud Pública, Jorge Venegas, había advertido en 2011 a uno de los dueños de Siemm (Eguren) que no podía contratar a su empresa. La emergencia móvil fue contratada en 2013, cuando la ministra era Muñiz, quien ya había recomendado firmar un convenio con Siemm aun cuando la empresa no estaba habilitada para funcionar.
Director se contrató a sí mismo
Marcos García, uno de los tres dueños de Siemm, contrató los servicios de su empresa por compra directa entre marzo y junio de 2013, cuando todavía era director del hospital de Bella Unión.
Lo que no probó (y sigue bajo sospecha)
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La presidenta de ASSE, Susana Muñiz, y el vicepresidente del organismo, Mauricio Ardus, entran junto a sus asesores al Parlamento
El desmantelamiento
Los legisladores no pudieron demostrar que los tres dueños de la empresa Siemm desmantelaron el servicio de traslados anterior que funcionaba en el Hospital de Bella Unión hasta 2013. No hubo pruebas de que los funcionarios de ASSE que brindaban el servicio renunciaron bajo presión de los jerarcas.
Equipos públicos con otros fines
No surgieron pistas en la comisión investigadora que demostraran que la empresa de traslados Siemm utilizaba equipos de la emergencia del hospital público al servicio de los socios privados.
Empresa especial
Si bien las fechas coinciden, no quedó claro que los tres dueños de la empresa de traslados Siemm hayan creado especialmente la compañía para brindar servicios en el Hospital de Bella Unión.
Aumento desproporcional
Es cierto que el costo en traslados aumentó en 14 veces cuando ASSE contrató a Siemm en 2013. Sin embargo, las autoridades no dieron información sobre la cantidad de kilómetros que habían hecho las ambulancias en 2012, antes de emplear a la firma. Los legisladores no pudieron demostrar entonces que en los dos años se recorrieron la misma cantidad de kilómetros con gastos absolutamente distintos.
¿Muñiz recibió la carta?
Aunque hay testigos que aseguran haber entregado en 2013 una carta a la entonces ministra de Salud Pública, Susana Muñiz, no quedó claro que la médica hubiera recibido el texto que relata presuntas irregularidades en el Hospital de Bella Unión.
