Brasil cuenta con las bases necesarias para consolidarse como el principal jugador del mercado mundial de soja en los próximos 10 años dejando atrás a Estados Unidos y Argentina en un segundo escalón.
Así surge de un estudio del banco especializado en materias primas, Rabobank, sobre la competitividad de los principales exportadores mundiales de soja.
Para el ciclo 2029/2030 la producción de soja en Brasil podría llegar a 155 millones de toneladas, con un incremento de 28% frente al ciclo 2019/2020. En el análisis del Rabobank, Brasil podría aumentar en 15% el área y 9% el rendimiento. Para el banco, las principales ventajas competitivas de Brasil en el mediano plazo se basan en la posibilidad de aumentar la superficie con la conversión de áreas de pasturas. A eso se suman los avances logísticos con el desarrollo de terminales portuarias sobre el Norte y nordeste del país que achican los costos de transporte.
En el caso de Estados Unidos, el Rabobank prevé que en la zafra 2029/2030 la cosecha se ubique sobre 123 millones de toneladas con estabilidad en el área y una ganancia de 10% en los rendimientos en los próximos 10 años.
Mientras la infraestructura de transporte sigue siendo la principal ventaja competitiva de EEUU frente a los exportadores, “los altos costos de la tierra y varios años de márgenes limitados han improbable una aumento relevante del área en los próximos años”.
Para Argentina el banco no prevé un ajuste en el área con un incremento potencial de la productividad de 6% con lo que se podría llegar a una producción de 64 millones de toneladas para 2029/2030. Mientras los productores argentinos tienen menores costos variables frente a EEUU y Brasil, las retenciones sobre las exportaciones afectan negativamente los márgenes agrícolas.
Esta semana la estatal Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab) de Brasil divulgó las primeras proyecciones sobre la campaña agrícola 2020/2021. La producción de granos y oleaginosas llegaría a un nuevo récord de 278,7 millones de toneladas, un aumento de 8% frente al ciclo anterior.
Para el maíz la Conab previó un incremento de 7% en el área del maíz apuntando a una producción de 112,9 millones de toneladas contra los 101 millones toneladas del ciclo anterior.
La cosecha de soja debería llegar a 133,5 millones de toneladas con un incremento de 3% del área. “La buena rentabilidad del maíz y la soja en la zafra que está cerrando estimula a los productores brasileños a aumentar el área de ambos cultivos para 2020/2021, según se destacó en el reporte de la entidad.
La Conab dijo que el interés por la soja refleja la expectativa que se mantenga la buena rentabilidad. “Los precios de la oleaginosa deben mantenerse elevados, impulsados por la valorización del dólar y por la buena demanda internacional”, subrayó el reporte.
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