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China acusa a Estados Unidos de invadir sus aguas territoriales
Las Fuerzas Armadas de China denunciaron que el destructor estadounidense USS Benfold entró en aguas territoriales del país asiático en el mar de China Meridional sin autorización.
"El destructor estadounidense USS Benfold entró ilegalmente el 13 de julio en aguas territoriales del archipiélago chino de Xisha (islas Paracelso) sin la autorización pertinente del Gobierno de China", indicó el portavoz de las FFAA, Tian Junli, en un comunicado.
Los militares estadounidenses, señaló, violaron gravemente la soberanía y la seguridad de China, socavando la paz y la estabilidad en el mar de China Meridional, así como las normas del derecho internacional.
En respuesta al paso del Benfold, el Distrito Militar del Sur de China rastreó los movimientos del buque y le ordenó que abandonara la zona, aseguró TianJunli.
"Nuestras tropas en la zona militar están en alerta máxima en todo momento para salvaguardar la soberanía nacional, la seguridad, la paz y la estabilidad en el mar de China Meridional", dijo el ministerio.
Tian subrayó que ese comportamiento de los estadounidenses es una prueba más de que intentan militarizar el mar de China Meridional.
"Los hechos muestran nuevamente que Estados Unidos es el origen de los riesgos a la seguridad en el mar de China Meridional, así como el mayor agitador de la paz y la estabilidad en la región", recalcó.
El 31 de marzo el portavoz del Ministerio de Defensa, WuQian, comunicó que Pekín posee la soberanía "incuestionable" sobre las islas del mar del Sur de China y sus aguas adyacentes. Además, subrayó que estos hechos demuestran que Estados Unidos es el mayor impulsor de la militarización del mar del Sur de China y el mayor destructor y violador de la paz y la estabilidad en la región.
Desde hace años hay tensiones en el Mar de China Meridional por las reivindicaciones de algunos países de la región sobre el archipiélago Spratly y las vecinas islas Paracel. Además de su ubicación estratégica en la encrucijada de las rutas marítimas de los océanos Índico y Pacífico, el valor de las islas también viene determinado por el hecho de que sus plataformas, según los expertos, contienen importantes reservas de petróleo y minerales.
Aunque China y Vietnam son los principales protagonistas de la disputa por la propiedad, Brunei, Malasia, Taiwán y Filipinas también han reclamado parcial o totalmente las islas y sus aguas circundantes.
