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Cientos de manifestantes volvieron a tomar el parlamento iraquí: hay más de cien heridos
Los partidarios del clérigo iraquí Moqtada al-Sadr volvieron a tomar este sábado el parlamento en Bagdad, en menos de una semana, para evitar que los legisladores elijan a Mohammed al Sudani como nuevo primer ministro, luego que ha sido vinculado al anterior Gobierno, acusado de corrupción.
Los manifestantes irrumpieron una vez más el parlamento iraquí en una muestra de apoyo al influyente líder chiíta Muqtada al-Sadr, dejando al menos 125 heridos y escalando un enfrentamiento político.
La protesta de este sábado se produce días después de que los manifestantes irrumpieran en el cuerpo legislativo y suspendieran una sesión para nominar a un nuevo primer ministro. La primera manifestación en contra del nombramiento del Mohammed al Sudani como primer ministro se registró este martes 27 de julio.
Las fuerzas de seguridad iraquíes usaron gases lacrimógenos y bombas de sonido para tratar de repeler a la multitud y causaron varios heridos entre los manifestantes.
Las protestas de hoy empezaron a primera hora de la mañana con miles de manifestantes ocupando la céntrica plaza Tahrir de Bagdad, donde cantaron consignas contra la influencia de Irán en la política, contra la corrupción y contra la candidatura de Al Sudani.
Miles de simpatizantes reunidos por Sadr y su Movimiento Sadrista derribaron las barreras de hormigón el sábado y entraron en la Zona Verde, que alberga los departamentos gubernamentales y las misiones extranjeras, antes de irrumpir en el parlamento.
La tensión incrementó en junio, cuando el Bloque Sadrista, que salió vencedor de las elecciones del pasado octubre con 73 escaños, se retiró del Parlamento ante el bloqueo del Marco de Coordinación para elegir un presidente y formar Gobierno.
Los manifestantes se oponen a la candidatura de al-Sudani, exministro y exgobernador provincial, elegido por el Marco de Coordinación para el cargo de primer ministro.
La coalición Marco de Coordinación, un conjunto de partidos chiíes afines a Irán, grandes derrotados en las legislativas del año pasado, en las que se hizo con la victoria la alianza Sayirún.
Esta nueva acción sobre el Parlamento iraquí vuelve a poner de manifiesto el bloqueo político que hay en la democracia del país de Oriente Medio y la falta de entendimiento entre los diferentes bandos enfrentados.
