Nacional > 19 de Abril
Cómo fue la negociación para que el asesino del policía se entregara en su barrio
La policía llegó al barrio 19 de Abril este jueves de mañana con la convicción de que allí iban a encontrar al joven de 17 años que este miércoles a las siete de la mañana asesinó de un disparo en la cabeza a César Texeira Meneses, un policía 29 años que a esa hora se dirigía en su moto a trabajar.
Entraron en 12 viviendas pero no lo encontraron. Tampoco estaba el cómplice, el otro joven que estaba con él al momento del disparo y del asalto, ya que se llevaron el arma de reglamento de Texeira.
En una de las casas allanadas vivía el presunto asesino, un adolescente con un largo historial delictivo –supuesto autor de varios delitos en las últimas semanas–, y quien, según la policía, estaba asumiendo una posición de liderazgo en una de las bandas de narcotraficantes del barrio.
El joven no estaba en la casa, pero sí estaban algunos de sus familiares directos, y entonces comenzó una "larga negociación", dijeron a El Observador fuentes del Ministerio del Interior.
En el operativo estaba el jefe de la Zona Operacional IV, Álvaro García, con experiencia en negociaciones con delincuentes, y el director de Seguridad y Convivencia Ciudadana de la cartera de seguridad, Gustavo Leal –entre otros–, quienes fueron piezas clave para convencer a la familia de que aportara información sobre el sospechoso o que se comunicaran con él.
Las fuentes informaron que Leal le dijo a una de las hermanas del joven buscado que quería hablar con su madre, quien se había mudado de la casa porque había sido baleada días atrás.
Y a la hora 15.12, dijeron los informantes, Leal recibió el llamado de esa mujer, y le dijo que estaba dispuesta a colaborar para que su hijo fuera detenida. "Ella sabía dónde estaba, tenía una idea".
Entonces acordaron hablar en persona, y en el propio Ministerio del Interior. "Le planteamos con claridad que no íbamos a negociar nada, que era algo que se tenía que resolver ya, y que solo había que acordar los términos de la entrega", añadieron las fuentes policiales.
En una de las oficinas de la Secretaría de Estado, la mujer comenzó a dialogar con su hijo a través de WhatsApp, con Leal y García al lado suyo, dándole las instrucciones de lo que decir.
Fueron más de dos horas de mensajes y respuestas, hasta que sobre las seis de la tarde el joven aceptó entregarse.
"Él pedía que no hubiera enfrentamiento armado", contaron las fuentes.
De hecho, esa misma tarde el incipiente líder narco había estado enfrentándose a los tiros con una banda enemiga de la zona, por lo que también estaba escondido por esa razón. "El acuerdo era garantía de seguridad para todas las partes".
Pero el adolescente también quería otra cosa: que el propio Leal estuviera en el punto de encuentro como "garante" de que él no fuera lastimado.
Y así ocurrió. Sobre la hora 18.30 una delegación policial junto con el director de la cartera y la madre del sospechoso concurrió a la esquina pactada y, entonces, 10 minutos después, apareció el adolescente caminando y desarmado.
Pero no estaba solo. Junto con él había otro joven que, aunque no participó del asalto y asesinato, decidió igual entregarse luego de que se viralizara en las redes sociales una foto en la que aparecía posando con el presunto homicida en el capó de un auto: su amigo armado con una pistola y mirando a cámara, y él mostrando el dedo mayor.
La otra persona, que simuló el miércoles de mañana con el presunto asesino que la moto en la que iban estaba averiada para luego matar a Texeira, todavía no fue detenida, pero las fuentes aseguraron que eso iba a ocurrir "en las próximas horas".
También se estaba negociando su entrega.
