Coronavirus en Estados Unidos: la vacunación y su fórmula para combatir los contagios, muertes y hospitalizaciones

Los datos de la vacunación, además de alentadores, resultan eficaces para las autoridades locales, que planeaban reducir las hospitalizaciones, muertes y contagios masivos en el corto plazo, a medida que el plan cobraba fuerza. Esa estrategia se plasmó rápidamente en los números globales de contagios que presentó el país, que promedió en la última semana casi 26 mil casos nuevos, 19,5% menos que en los anteriores siete días, muy lejos de los 62 mil que mantenía hace un mes y aún más distante de los 259 mil que llegó a mantener a principios de enero. La población vacunada con primeras dosis ya es el 49% y la completamente inmunizada supera el 39% a cinco meses de iniciada la campaña, de acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

Pero la mejora es aún más notoria en aquellos estados que aumentaron sus vacunados con más rapidez que otros. Es el caso de Hawaii, Maine, Connecticut, Massachusetts, Nueva Jersey, New Hampshire y Vermont. Estas localidades, con el 60% de los adultos vacunados, reportaron 66 casos nuevos de covid-19 por cada 100 mil habitantes frente a los 73 –10% más– de otros estados.

Las diferencias entre los siete territorios que más vacunaron se acentúan respecto a los 10 que menos lo hicieron –Alabama, Arkansas, Georgia, Idaho, Louisiana, Mississippi, Carolina del Sur, Tennessee, Virginia Occidental y Wyoming–, que promedian 78 contagios por cada 100 mil habitantes y suman 19% más de casos nuevos que los que están más cerca de la inmunización. En Vermont, por ejemplo, el 78% de los adultos ya están vacunados y en Mississippi, uno de los que más lento crece, hasta el momento solo se capta al 45%.

A nivel país, con la luz verde dada para la inoculación de los mayores de 12 años, el grupo de los mayores a 65 años ya recibió al menos una dosis de una de las vacunas disponibles en el 85,2% de los casos y el 73,7% adquirió ambas inyecciones en alguno de los 50 estados. Considerada como población de riesgo, es la franja etaria que avanza más rápido mientras que en el resto del país el 60% de los adultos y el 58,2% de los menores ya recibieron una primera dosis.

Para el gobierno, cuanto más vacunados haya, mejor. Así sean extranjeros o estadounidenses, las autoridades entienden que Estados Unidos retomó el número de casos diarios de principios de abril de 2020 y redujo las hospitalizaciones al mínimo gracias a la aplicación de sus vacunas. Por esa razón, diversos vacunatorios omiten, incluso, el requisito de presentar documentación y otros, como es el caso de Miami y Nueva York, montan esfuerzos en conquistar a los turistas que en su país de origen están imposibilitados de acceder a un fármaco en el corto plazo.

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El promedio semanal de vacunados en Estados Unidos dio cuenta de un registro masivo de 1,8 millones de personas, una cifra que, aunque disminuyó 12,5% respecto a la anterior semana, afianza al ritmo de vacunación y repercute directamente en la disminución de las hospitalizaciones (bajaron 15% en los últimos siete días) y fallecimientos (disminuyeron 10,5% en comparación con el promedio móvil de 7 días anterior), entienden los científicos.

La mayoría de los inoculados recibieron el fármaco de Pfizer, en tanto otro alto porcentaje recibió las dosis de Moderna y un número más reducido fue inyectado con la vacuna de una sola dosis, elaborada por Johnson & Johnson. De a poco, cualquiera de las personas inoculadas con alguna de esas vacunas ya comenzaron a dejar atrás el uso del tapabocas y pueden participar de actividades sin mantener distanciamiento físico, ya sea en espacios cerrados o al aire libre, tal y como recomiendan las autoridades sanitarias.

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La guía corre para aquellos ciudadanos totalmente inmunizados, aunque no excluye, de momento, la recomendación de llevar barbijo en el transporte público, en los aeropuertos y las estaciones de ferrocarril.