Mientras el presidente chileno Sebastián Piñera pidió perdón este martes por su "falta de visión" para anticipar las protestas, el ejército chileno decretó toque de queda por cuarta noche consecutiva en Santiago, en medio de enfrentamientos en las calles que dejan 15 muertos en todo el país, cuatro por balas disparadas por las fuerzas de seguridad. El resto murió en medio de incendios y saqueos, según la Fiscalía.
En un mensaje filmado desde el palacio presidencial de La Moneda, Piñera realizó autocrítica en la noche de este martes. "Reconozco esta falta de visión y le pido perdón a mis compatriotas", dijo el jerarca.
"Es verdad que los problemas no se produjeron en los últimos días, se venían acumulando desde hace décadas. Pero es verdad también que los distintos gobiernos no fueron o no fuimos capaces de reconocer esta situación en toda su magnitud", admitió Piñera.
Al referirse a las protestas, señaló que no solo ha notado "graves hechos de violencia" sino también escuchado "la voz de las chilenas y los chilenos que han expresado pacíficamente sus problemas y sus esperanzas de una vida mejor".
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— Sebastian Piñera (@sebastianpinera) October 23, 2019
Para Piñera "todos" quieren que se termine el estado de emergencia y los sucesivos toques de queda pero entiende que, como presidente de Chile, lo puede hacer solo cuando "tenga seguridades que la tranquilidad y la seguridad de los ciudadanos y la protección de los bienes tanto públicos como privados, estén debidamente resguardados".
Las protestas, en tanto, se mantenía en intensidad en lugares como Plaza Italia, Plaza Ñuñoa o el parque Araucano, en el este de Santiago, hasta donde habían llegado miles de chilenos.
"La Jefatura de la Defensa Nacional Región Metropolitana informa a la ciudadanía que el martes 22 de octubre habrá Toque de Queda desde las 20:00 horas hasta las 05:00 horas del día miércoles 23 de octubre", informó el Ejército en su cuenta en Twitter.
Santiago y la mayoría de las 16 regiones de Chile se encuentran en estado de emergencia y 20.000 militares y policías contienen las violentas protestas.
Las manifestación comenzaron por el alza del precio de la tarifa del metro en Santiago, pero derivaron en un mayor movimiento que pone sobre la mesa otras demandas sociales.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, comenzó el martes a jugar la carta política para intentar acallar las masivas protestas ciudadanas con un acuerdo social pero los principales partidos de oposición le dieron la espalda y en la calle las revueltas mantenían su intensidad.
El partido Socialista, el más grande de la oposición, el Frente Amplio y el Partido Comunista se abstuvieron de participar en la reunión convocada por Piñera para buscar un acuerdo social.
Con información de AFP
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