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Denuncian a la Armada por "graves irregularidades" en detención del pesquero chino
Algunas horas después de que la Fiscalía archivara la investigación por la detención de la Armada del buque pesquero chino "Lu Rong Yuan Yu 606", la Cámara de Agentes Pesqueros Extranjeros (CAPE) emitió un duro comunicado en el que denunció "graves irregularidades" en el accionar de la fuerza de mar.
El documento, al que accedió El Observador, da una versión distinta acerca de lo ocurrido durante la detención. Señala que el barco no estaba pescando por lo que su presencia era "completamente legal", asegura que siempre tuvo el radar encendido y que por razones que desconocen el Comando de la Flota, a cargo de la tarea, no participó a la Prefectura ni a la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) pese a que el barco que efectuó la detención -el ROU 23 Maldonado- zarpó del Puerto de Montevideo.
"Pese a las declaraciones de la Armada Nacional, el buque no tenía sus artes de pesca desplegadas. Incluso se menciona la presencia de redes pese a que este tipo de barcos 'poteros' no cuentan con redes ni capacidad para usarlas", comienza señalando el texto, que subraya que ingresó a aguas uruguayas el 30 de junio con su sistema de identificación satelital (AIS) encendido, mostrando su geolocalización "en forma permanente".
Según la CAPE, el barco utilizó su “ancla de capa” con la intención de aguardar directivas para ingresar al Puerto de Montevideo y la Armada envió a la Aviación Naval para "visualizar y documentar" la actividad del buque. Luego zarpó el ROU 23 Maldonado para inspeccionarlo, tiempo durante el cual el buque pesquero "permaneció con su identificador encendido". "Pese a que zarpó del Puerto de Montevideo, la Armada no dio aviso a la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) ni a la Prefectura", agrega.
"Las maniobras evasivas del barco, mencionadas por la Armada, refieren a que el buque no permitió el abordaje en primera instancia ya que el ROU Maldonado se aproximó durante la noche, con su sistema de identificación satelital apagado (lo cual es lógico en una maniobra de este tipo), y hubo problemas con la comunicación. Sin embargo, si bien se trata de un barco que navega al doble de velocidad que el buque de la Armada, puso rumbo hacia Montevideo durante la noche (tal como manifiesta la Armada). Al amanecer, con la visibilidad mejorada, el “Lu Rong Yuan Yu 606” esperó al buque de la Armada para el legítimo abordaje e inspección. No hubo ninguna 'persecución'", subraya el comunicado.
En la investigación de Prefectura, los marineros de la Armada aseguraron que el pesquero no acató la “orden de parar” y que por eso lo detuvieron, según había informado El Observador a partir de fuentes del Ministerio de Defensa. Esa orden tenía como objetivo enviar una “dotación de visita” para inspeccionar el barco.
Los marineros expresaron que no tenían pensando apresar al pesquero –pese a que el operativo se había iniciado porque creían que estaba pescando de forma ilegal– pero que debieron hacerlo por la falta que supuso no acatar la orden.
El comunicado de la CAPE menciona que el acta de abordaje da cuenta que no se encontró nada irregular, lo que fue ratificado luego por la inspección de la Dinara. "En las bodegas del barco solo había 11 toneladas de calamar congelado con varios días de almacenado (el buque tiene capacidad para 500 toneladas)", señala.
Este martes, el vocero de la Fiscalía, Javier Benech, contó que la fiscal Silvia Naupp archivó la investigación porque el informe de la Dinara afirma que no puede concluir que existió pesca ilegal en aguas uruguayas y que no hubo desacato por "problemas de comunicación derivados de problemas de idioma".
La cámara también expresó que el buque detenido pertenece a un armador que opera regularmente en Montevideo que no tiene antecedentes negativos y señala su preocupación por la "gravedad de estos hechos" en momentos en que Uruguay pretende avanzar hacia la firma de un TLC con China.
El comunicado rechaza la captura y menciona que no se habría cumplido con el debido proceso. También critica el "posterior manejo comunicacional de este lamentable episodio, declarando públicamente una culpabilidad sin haber siquiera iniciado una investigación".
Por último, se ponen a disposición para colaborar y evitar nuevos incidentes de este tipo que "afectan la imagen del país y de la actividad" y respaldan la tarea de la Armada para combatir la pesca ilegal aunque expresan preocupación por la falta de equipamiento para "poder cumplirla adecuadamente".
