El partido entre Peñarol y Plaza Colonia que terminó con un amargo 0-0, culminó a su vez con una gran polémica.
Es que en el minuto 90+3' cuando culminaba el mismo, hubo una jugada en la que podría haber cambiado el resultado del compromiso.
Luego de un córner ejecutado por Jesús Trindade y una mala salida de Santiago Mele, la pelota derivó hacia un cabezazo de Agustín Canobbio casi sin arquero -ya que el mismo se había abierto demasiado hacia la otra punta- y el mismo, dio de lleno en la mano de Yvo Calleros.
Era penal, pero ni el juez Diego Riveiro, ni el segundo asistente, Marcelo Alonso, lo vieron y de esa forma, perjudicaron a Peñarol.
Cabe recordar que hace solo tres días, en el primer tiempo del partido que igualaban 0-0 Peñarol y Boston River también en el Estadio Campeón del Siglo, el árbitro Christian Ferreyra tampoco vio una clara mano de un futbolista de los rojiverdes. Luego, en el complemento, pitó dos penas máximas para los mirasoles.
En este caso, luego de que la pelota le pegara en su mano izquierda, Calleros se dio vuelta como tratando de disimular en un claro gesto instintivo.
Las protestas de todo Peñarol no sirvieron de nada y Riveiro y su asistente Alonso no pitaron la pena máxima como hubiera correspondido.
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