Montevideo tiene la tasa más baja de fallecidos por accidentes de tránsito con un promedio de 8 fallecidos cada 100 mil habitantes por año. Maldonado, por el contrario, es el departamento que tiene la tasa más alta, con 30,5 muertes cada 100 mil habitantes por año. Sin embargo, la Intendencia de Montevideo (IMM) no se conforma con esta cifra y en los últimos días presentó su primer plan de seguridad vial, que busca continuar con la tendencia a la baja de los siniestros de tránsito en la capital. El objetivo de cara al futuro es alcanzar un promedio de 5 muertes cada 100 mil habitantes, una cifra que se asemeja a la de varios países de Europa.
En febrero de 2019, cuando la comuna comenzó a trabajar en este plan, anunció la creación de la Unidad de Análisis de Seguridad Vial, que funciona en la órbita del departamento de Movilidad y que lidera el exdirector de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), Gerardo Barrios.
Con la llegada de Barrios y con la mira puesta en la elaboración de este plan de seguridad vial, la IMM formó el Consejo Municipal de Seguridad Vial, integrado por representantes de cada uno de los ocho municipios. De esta manera, el equipo de trabajo identificó los puntos críticos en materia de tránsito en los municipios montevideanos.
De esta manera, el plan de seguridad vial arrojó varios resultados respecto a los siniestros que se producen en los municipios. El Municipio D es el que registra una mayor cantidad de lesionados graves o fallecidos en el tránsito, con un promedio de 62 personas por año. Seguido del Municipio D, el segundo con más lesionados graves o fallecidos en el tránsito fue el A (52), el B (34), el G (24), el C (19), el E (15), el F (15) y el CH (9).
El paquete de medidas incluidas en el plan, con proyección hasta 2020, contiene la necesidad de generar vías más seguras, vehículos más seguros, usuarios más seguros y una mejora de las respuestas sanitarias. Por ejemplo, algunas de las medidas que se proponen en los puntos críticos tienen que ver con mejorar la señalización, mantener la vegetación para que no obstruya la visión, mover aquellos contenedores que molesten, trasladar columnas y paradas de ómnibus, así como reparar el pavimento que esté deteriorado. Algunas medidas serán ejecutadas en los próximos tres meses, otras en un plazo de tres a seis meses y otras más en un plazo mayor a seis meses.
"La temporalidad definida del plan es hasta diciembre de 2020 y por lo tanto cada municipio, en forma conjunta con la unidad, articulará las acciones para el período junio 2019-diciembre 2020", afirma el documento presentado en los últimos días por las autoridades del gobierno departamental.
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