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El análisis que espera Lacalle Pou para dar su opinión sobre el caso Minerva
El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, se refirió a la la compra de Minerva Foods de tres frigoríficos en Uruguay que pertenecen a Marfrig Global Foods y que está generando preocupación en diferentes actores de la industria por una posible concentración del mercado.
Lacalle se refirió a la consulta en tres puntos. En el primer punto señaló que tiene "preocupación". Pero en el segundo, señaló que la decisión del gobierno no puede ser "caprichosa". "Hay una inversión importantísima, vamos a alegrarnos que hay importantes empresas que ponen su vista, sus ojos en nuestro país", aseguró.
Y con respecto a la posible concentración del mercado que plantearon los diferentes actores, como los productores, señaló que debe ser la Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia (Coprodec), órgano técnico independiente que acciona en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) la que se expida sobre el tema. Si esto genera o no algún tipo de concentración, no monopolio, le corresponde a Defensa de la Competencia. Hace unos meses esta firma compró BPU y ¿Qué hicimos nosotros? Con la independencia que actúa defensa de la competencia dijo que no había riesgo de concentración ante esa operación, que significaba un 23% del mercado en ese caso", señaló Lacalle.
"Ahora con la compra de las plantas de Marfrig, salvo la de Tacuarembó, habría que ver, dicen algunos que se estaría llegando aproximadamente a un 46%, casi un 50%. Yo tengo mi opinión, esperemos el análisis profesional y técnico de defensa de la Competencia y ahí el Poder Ejecutivo va a tomar una decisión basado en esos elementos", agregó.
"La opinión mía la van a tener después de Defensa de la competencia. Cuanto antes se diluciden, mejor porque genera certidumbre. Lo que necesita Uruguay es certidumbre y no andar durmiéndola, cuanto antes tenga un dictamen mejor para los posibles compradores, para los posibles vendedores, para los productores que están preocupados por la concentración y para el gobierno que da lineamientos claros", sostuvo.
Minerva y la compra que generó preocupación
Minerva Foods anunció al inicio de esta semana la compra de 16 frigoríficos en la región, todos pertenecientes al grupo Marfrig, tres de ellos activos en Uruguay: Colonia, La Caballada (Salto) e Inaler (San José). Ya gestionaba los frigoríficos PUL, Carrasco y Canelones y este año adquirió el frigorífico BPU (en Durazno). Por lo tanto, el avance es a siete complejos industriales (todos en la lista de los 10 de mayor actividad de faena e industrialización) y así a un 43 o 44% de la faena.
En tanto, Marfrig quedaría en Uruguay solo con el frigorífico Tacuarembó.
La Comisión de Defensa de la Competencia hace un mes aprobó la venta de Breeders & Packers (BPU) a Minerva Foods, decisión ya muy cuestionada por las gremiales que nuclean a los ganaderos, dado que se entiende se le avecina al productor un escenario con menos competitividad en la gestión de compra de haciendas.
La mirada de los ganaderos fue compartida por parlamentarios, por el ministro de Ganadería, Fernando Mattos, por consignatarios de ganado (abordarán el tema en una reunión el próximo lunes) y también por el presidente del INAC: Ferber había definido al anuncio de Minerva Foods como una "pésima noticia" que enciende "una luz roja".
"Muy peligroso", fue el concepto utilizado por Patricio Cortabarría, presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), luego de una reunión en la que Lacalle Pou recibió a representantes de la gremial que nuclea a productores ganaderos.
Jorge Andrés Rodríguez, presidente de la Federación Rural (FR), advirtió sobre que en Paraguay Minerva Foods posee más del 50% de la faena de vacunos "y los cambios de precios son bruscos".
El senador nacionalista (también productor agropecuario) Sebastián Da Silva marcó el riesgo que implica que uno de cada dos novillos o una de cada dos vacas gordas pase a ser faenado por una misma empresa: "Es obvio que hay un mercado concentrado", apuntó, y sobre la inversión señaló: "Es complicado para el paisano".
También, apenas se conoció la noticia, surgió una queja desde la Federación de Obreros de la Industria Cárnica y Afines (Foica), cuando Martín Cardozo, vocero del sindicato, dijo que entre los trabajadores la noticia genera preocupación e incertidumbre sobre las perspectivas laborales y futuras negociaciones con una empresa que manejará cerca del 50% de la faena con un conjunto de unos 6.000 trabajadores.
