El empresario Jorge "Corcho" Rodríguez negó haber participado del circuito del dinero ilegal en la causa que investiga los cuadernos de las coimas "K", según publicó el diario argentino La Nación.
Rodríguez se presentó este martes ante el juez Claudio Bonadio para negar cualquier vínculo con los delitos que se investigan. En su declaración, que duró casi dos horas, el empresario aclaró que el día que Oscar Centeno, chofer del valijero kirchnerista Roberto Baratta, lo menciona en sus anotaciones, él se encontraba de viaje en Estados Unidos. Según La Nación, su abogado defensor presentará como prueba el pasaporte sellado para demostrarlo.
La declaración ocurrió mientras la justicia
argentina investiga una propiedad de Rodríguez en la que el exfuncionario kirchnerista, Baratta, habría retirado pagos ilegales, según Centeno. "Quiero aclarar porque no consta en los cuadernos que Corcho Rodríguez tiene en Munro, por la calle Bernardo de Irigoyen, un subsuelo grandísimo preparado para boliche donde tiene autos de alta gama y motos. Ahí íbamos siempre a buscar dinero que entregaba el mismo Corcho Rodríguez", dijo el exchofer de Baratta en su primera declaración ante la justicia.
Rodríguez también es investigado por la causa de las obras de AySA contratadas por Odebrecht, que podría estar vinculada a la de los cuadernos "K".
Los ocho cuadernos que dieron origen a la causa en la justicia fueron entregados por una fuente a un periodista del diario La Nación. En ellos habían apuntes que tomó Centeno, el chofer del Ministerio de Planificación. Durante 10 años realizó anotaciones que describen los recorridos por Buenos Aires con su jefe, el ex viceministro de Planificación Roberto Baratta, para llevar bolsos repletos de dólares en
efectivo.
Los cuadernos han llevado a la detención a una decena de ex funcionarios kirchneristas. El caso involucra también a los más grandes
empresarios de Argentina, entre estos Ángelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri. También figuran exdirectivos de la compañía ítalo-argentina Techint y representantes de la Cámara de la Construcción. Muchos de los empresarios detenidos se declararon como arrepentidos ante la justicia, lo que ha permitido que varios sean excarcelados.