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En el Gran Parque Central: Corinthians protestó contra el racismo, que denunció contra Nacional
Jugadores y asistentes de Corinthians femenino se manifestaron contra el racismo en la final de la Copa Libertadores que se jugó este domingo en el Gran Parque Central, luego de denunciar insultos en el partido que jugaron ante Nacional en semifinales.
Cuando se hizo un minuto de silencio previo al inicio del encuentro, las futbolistas del equipo braisleño (en el campo de juego), los técnicos, asistentes y suplentes (afuera de la cancha), se arrodillaron en el césped y llevaron su mano derecha arriba en el gesto contra el racismo que se ha popularizado en el deporte en los últimos años.
Las brasileñas hicieron su protesta en medio de un respetado minuto de silencio en el Gran Parque Central, que contó con un buen marco de público en sus tribunas principales, con muchas familias y jugadoras de equipos femeninos de distintas categorías.
Corinthians denunció insultos racistas en la semifinal del pasado martes ante Nacional jugada en Paraguay, en el que una de sus futbolistas, Adriana, fue llamada “macaca” por una jugadora tricolor, según la denuncia.
El hecho generó reacciones de otros equipos que se solidarizaron con las paulistas, como también de la selección femenina brasileña. Además, la Conmebol relanzó una campaña contra el racismo en el fútbol.
La Conmebol también abrió un expediente disciplinario para investigar lo ocurrido.
Desde Nacional, tras el partido se manifestó la capitana Valeria Colman. "Pedimos disculpas si alguna jugadora se sintió ofendida, no era nuestra intención", dijo.
El jueves, el presidente del club, José Decurnex, fue consultado al respecto. "En este momento no tenemos nada, entiendo que se abrió un expediente en la Conmebol y serán los delegados quienes trabajen en eso y determinaremos cuáles son las acciones a seguir", señaló.
