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Estado Islámico cede territorios pero aún está lejos de extinguirse
A la pérdida de Deir Ezzor en Siria, se sumó la de Al Qaim en Irak
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06 de noviembre de 2017 a las 05:00
La pérdida por el grupo Estado Islámico de Deir Ezzor, última ciudad que controlaban en su "califato", constituye un golpe duro para la organización yihadista pero no significa ni su derrota definitiva ni su erradicación, advierten expertos y funcionarios.
La conquista por el ejército sirio, anunciada el viernes pasado, de su último centro urbano, llevará al Estado Islámico a convertirse en movimiento yihadista clandestino tras fracasar en su propósito de conservar y gobernar en Irak y Siria un territorio tan vasto como Italia, poblado por siete millones de habitantes, consideraron distintos analistas.
Lo más probable es que el grupo se transformará en guerrilla en las zonas pobladas de musulmanes sunitas, que ni Irak ni Siria lograrán controlar totalmente, al mismo tiempo que mantendrá focos insurreccionales en otros países y seguirá inspirando atentados en el mundo entero a través de la propaganda de su "cibercalifato" y a través de "lobos solitarios", como ocurrió en Nueva York.
Acorralado
"Dáesh (acrónimo en árabe del EI) está acorralado, perdió sus dos capitales, otras ofensivas buscan aniquilar al seudocalifato y a sus presuntos soldados", aseguró el martes pasado en audiencia en el Senado la ministra francesa de los Ejércitos, Florence Parly.
"Pero no hemos terminado con el terrorismo; el atentado de Nueva York nos lo demuestra", añadió.
En Irak, el EI está siendo derrotado pero "la victoria militar no está acompañada de una visión política sobre la reintegración de la población árabe y sunita en el juego político", afirmó el investigador Jean-Pierre Filiu, profesor en Ciencias políticas.
"Las perspectivas son peores en Siria", agregó. "Esta falta de estrategia a largo plazo deja a Dáesh un importante espacio para recuperarse en un futuro cercano, al mismo tiempo que sigue animando en el mundo a redes de simpatizantes y militantes galvanizados por la extrema violencia de ese combate". acotó.
El EI en Irak fue la resurgencia del grupo yihadista Al Qaeda en Irak, fundado en 2004, derrotado tres años más tarde, y que pasó a la clandestinidad antes de reaparecer en otra forma.
"Más temible"
Es lo que puede pasar con el EI, advierten expertos que consideran posible la aparición en meses o años de un "Dáesh.2", tal vez más temible.
"Hay pocas dudas de que el Estado Islámico o algo similar sobrevivirá a la campaña mundial lanzada en su contra", consideró en un informe titulado "Más allá del califato", Richard Barrett, experto del Soufan Group y quien dirigió el contraterrorismo en el MI6 británico y Naciones Unidas.
Citó como uno de los peligros principales lo que harán los sobrevivientes del contingente de 40.000 combatientes extranjeros provenientes de 110 países, quienes ingresaron a los rangos del "califato" y ahora están o presos en Siria e Irak, de regreso a sus países de origen o en busca de una nuevo "territorio de yihad".
Para Colin P. Clarke, experto del grupo de reflexión Rand Corp, los reveses militares "fuerzan a la organización yihadista a cambiar estrategias y tácticas".
"El mundo asiste a la transición, y en cierta forma a la transformación de una organización dotada con cuarteles generales estables en red terrorista clandestina dispersa en la región y el mundo", destacó.
En Irak
Y en Irak las fuerzas del gobierno tomaron el viernes pasdo el control de Al Qaim, otro de los bastiones del grupo ubicado en el desierto occidental, cerca de la frontera con Siria, anunció el primer ministro, Haider Al Abadi.
En un comunicado, Al Abadi, había celebrado "la liberación de Al Qaim en un tiempo récord".
Las tropas gubernamentales y paramilitares iraquíes habían entrado ese mismo día en esta localidad donde vivían antes de los combates unas 50.000 personas.
La caída de Al Qaim dej´` a los combatientes yihadistas en Irak sólo con el control de la ciudad vecina de Rawa y los bolsones circundantes en el desierto junto al río Éufrates.
La doble ofensiva deja al EI con una única ciudad todavía bajo su control, Abu Kamal, en Siria.
Un oficial del ejército iraquí, que no quiso identificarse, señaló que los yihadistas dejaron el puesto fronterizo después de que varios de ellos murieron a manos del ejército.
Según la misma fuente, la mayoría "se fue en dirección a Siria", donde las fuerzas del régimen se encuentran ubicadas ahora a unos 40 kilómetros de Abu Kamal.
