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Gobierno argentino aumenta controles por costos de carnes
Un aumento en los precios de los cortes de carne vacuna en Argentina revivió los reflejos intervencionistas del gobierno que encabeza Alberto Fernández, aunque no se prevé una vuelta a la lógica de las administraciones kirchneristas.
En el sector privado estiman que el avance de los precios internos fue por un incremento de corto plazo, pero que la lógica de los valores es más bien bajista que alcista, teniendo en cuenta la realidad de los mercados externos.
Al cierre de marzo el gobierno adoptó medidas para controlar la evolución de los precios internos de la carne, algo que también se dio en otros rubros. La Secretaría de Comercio Interior (SCI) le encomendó a la Comisión Nacional de la Defensa de la Competencia realizar una investigación del mercado de carne.
El objetivo de la investigación es determinar si hubo empresas que incurrieron en delito al aumentar los precios de la carne en medio del aislamiento social y posterior cuarentena obligatoria dispuesta por el gobierno.
Asimismo, la SCI abrió un registro por 90 días en el que las empresas del sector tendrán que informar al cierre de cada mes la “cantidad diaria de kilos de media res y de cuero vacunos comercializados, su precio promedio diario de venta por unidad de medida y la categoría de origen de tales productos”.
A su vez, la Subsecretaria de Acciones para la Defensa del Consumidor podrá publicar periódicamente en su página web –y con acceso público– los precios de referencia de venta de media res y de cuero vacuno.
¿Intervención?
Entre los actores de la cadena cárnica se consideraron excesivas estas medidas, advirtiendo por el riesgo de una intervención cuando no hay razones para ello.
Un informe de Rosgan Mercado Ganadero indicó que la realidad del mercado externo sumado “a la nula reacción que actualmente podemos esperar por parte del consumo interno, lejos de requerir intervenciones para regular posibles incrementos de precios, no hace otra cosa que consolidar una tendencia a la baja en el corto plazo”.
En el reporte se indicó que la suba de precios obedeció a mayores compras luego que se adoptaran las medidas de cuarentena. “No se trata de un crecimiento genuino de la demanda. Lo que se compró de más en los últimos días será menor demanda para los próximos”, señaló el reporte.
Según cifras de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes, en los tres primeros meses del año las exportaciones de carne vacuna habrían sumado 136.300 toneladas de res con hueso, un volumen 8,5% inferior al primer trimestre del año pasado.
Esto se debió, fundamentalmente, a una retracción en los embarques a China y, especialmente, a la Union Europea.
La producción de carne en el primer trimestre fue de 720.000 toneladas de res con hueso, un aumento de 2,7% respecto a igual período de 2019. La demanda interna absorbió el 81,3% de la producción, 2,3 puntos porcentuales por encima de enero-marzo del año pasado.
Brasil exportó más
