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Iglesia Evangélica Armenia apunta a Misión Vida y rechaza apoyos a “candidatos políticos”
La viralización de un video en el que se ve a la senadora y precandidata nacionalista Verónica Alonso en una iglesia evangelista semanas atrás en camino Mendoza acompañada por el diputado Álvaro Dastugue provocó la reacción de la Iglesia Evangélica Armenia, que rechazó los apoyos a “candidatos políticos”.
Los evangelistas armenios publicaron un comunicado en el que señalan que “sugerirle a los miembros de la Iglesia el candidato al cual votar es quitarles el don precioso de la libertad, una vergonzosa manipulación y una ofensa a la inteligencia" de sus semejantes.
En el comunicado los evangelistas armenios recuerdan una publicación del año 2009 a cargo del pastor Pedro Lapadjian en el que manifiesta que “no es pertinente que la Iglesia se inmiscuya en el Estado, ni viceversa” y que “el ‘voto ‘que el ‘alma pronuncia’ debe ser emitido por cada individuo y no por la Iglesia como tal". En este sentido, afirman que su iglesia "no representa ni es representada por ninguna organización política, ni promueve a ningún candidato político”.
En el video que se viralizó, Alonso dijo que creía que le irá bien en las elecciones internas porque “Dios tiene un propósito para la nación” y aseguró ante los fieles que como presidenta derogaría la ley Trans, gran parte de la ley de marihuana y transformaría el Ministerio de Desarrollo para que incluya también a la familia.
El arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla, también había cuestionado que se mezclara a Dios en temas político-partidarios. “El Uruguay laico, plural y democrático es un bien para todos”, afirmó Sturla en entrevista con el semanario Búsqueda. “Que cada uno desde sus convicciones morales y religiosas actúe es lo que corresponde. Que haya grupos que, inspirados en principios cristianos, formen su partido o su lista ha pasado y pasa en la historia de las democracias occidentales, pero, aunque la línea pueda parecer sutil, que se mezcle a Dios directamente en una opción política determinada o que una iglesia apoye a un determinado partido no es bueno”, agregó.
Sturla dijo que la Iglesia Católica “opina con todo derecho como actor que es de la sociedad en los distintos aspectos que hacen a la vida de las personas y sobre todo a la dignidad humana, pero no se mete en cuestiones político-partidarias. Esto es fruto también de su experiencia histórica”.
Luego de las críticas, Sturla y Alonso se reunieron y coincidieron “en la urgencia de recuperar los valores entre los uruguayos”. “Nos unen los valores y el compromiso que desde nuestros lugares trabajaremos para construir un mejor Uruguay”, según indicó la Iglesia Católica en un comunicado.
