La candidata del partido de López Obrador es favorita para sucederlo en la presidencia

México es una amalgama entre el idioma español y 68 lenguas originarias, es la segunda economía latinoamericana después de Brasil y tiene un tratado de libre comercio con Canadá y Estados Unidos que rige desde 1994  y condiciona fuertemente los destinos económicos de México.

Sin embargo, desde que Andrés Manuel López Obrados (AMLO) asumió el gobierno el 1° de diciembre de 2018 quedó claro que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ya perdía de modo definitivo el “unicato” que constituía su presencia como fuerza política capaz de liderar el país.

El PRI fue fundado en 1929 y ganó las elecciones del año siguiente. Desde 1930 gobernó México hasta 2000 cuando un empresario, también de derecha como el PRI se impuso en los comicios. Fue Vicente Fox, quien se impuso con la boleta del Partido Autonomista Nacional (PAN).

En efecto, AMLO, con su partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), se afianzó en el poder y rompió un mito. En esta etapa, previa a las presidenciales, se percibe que va a romperse otro mito, que es el lugar del hombre en el país azteca. Es probable que terminen siendo dos mujeres las que disputen la llegada al Palacio Nacional, sede presidencial, ubicada frente a la histórica Plaza del Zócalo.

Claudia Sheinbaum tendrá que definir si es la sucesora de AMLO. El otro precandidato de Morena es Marcelo Ebrard, canciller del país. Sheinbaum ganó hace seis años la alcaldía de Ciudad de México convirtiéndose en la primera mujer en llegar a ese puesto. Ella, de padres que participaron de las luchas estudiantiles de 1968 y de origen judío, espera ahora terminar con otro mito. Es probable que el macho mexicano quede como una frase retórica.

Pero no solo el oficialismo, progresista, tiene a una mujer como favorita. El otro espacio que disputa este proceso hasta el 2 de junio del año próximo es una coalición donde está el PRI, también el PAN y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), llamada Frente Amplio y que tiene como favorita a otra mujer, Xóchitl Gálvez Ruiz.

La recta final de las precampañas presidenciales en México comenzó el domingo para la oposición y este lunes para el oficialismo. "Es la transformación y es tiempo de mujeres", proclamó el sábado Claudia Sheinbaum ante miles de seguidores reunidos en el céntrico Monumento a la Revolución, en el penúltimo acto de su campaña interna lanzada a mediados de junio.

A partir del lunes, una encuesta nacional definirá entre los dos rivales de peso –Morena y Frente Amplio- y otros cuatro aspirantes menores al sucesor, que probablemente sea sucesora, de AMLO quien, pese a mantener una alta popularidad, no podrá presentarse porque no lo permiten las leyes mexicanas.

Sheinbaum lanzó un llamado a "la unidad" de Morena, tras acusaciones de Ebrard de que ella se valió de fondos públicos en su precampaña. "Todo mundo habla de la unidad. Nada más que cumplan lo que se acordó", declaró con ironía Ebrard, que también renunció a su rol de canciller para este proceso.

La ex alcaldesa de Ciudad de México, favorita en las encuestas, cerró su campaña el domingo en Veracruz, al este del país, mientras que Ebrard lo hizo en Ciudad de México. Ambos pretenden capitalizar la herencia política de López Obrador, con cerca de 60% de aprobación tras casi cinco años de mandato.

Con apenas nueve años de existencia, su partido es mayoritario en las dos cámaras del Parlamento y gobierna 23 de los 32 estados mexicanos. "Es un honor estar con Obrador", coreó Sheinbaum con la multitud el sábado, replicando además frases textuales del presidente saliente: "Por el bien de todos, primero los pobres", "nuestra economía está fuerte, nuestras finanzas sanas", entre otras.

Del lado opositor, la senadora derechista Xóchitl Gálvez es la favorita en la encuesta que la confronta a partir del domingo con otra mujer, Beatriz Paredes, del PRI. De ascendencia indígena otomí y de origen popular, Gálvez recibió el apoyo de un pilar del partido derechista PAN, Santiago Creel, también precandidato que declinó a su favor.

Símbolo del despertar de una oposición que estaba debilitada y dividida, Gálvez se ha convertido en blanco de ataques de López Obrador desde el lanzamiento de su candidatura en junio.

La encuesta opositora dura hasta el miércoles, y luego habrá una consulta ciudadana el 3 de septiembre. Ese mismo día se anunciarán los resultados.